El Gobierno de Castilla-La Mancha está recuperando la perdiz roja autóctona a través de la puesta en marcha de un plan que ya está dando sus frutos y que se centra en dos líneas principales de trabajo: la recuperación genética de la especie y la reintroducción de la misma a través de la venta de pollos y huevos a las granjas comerciales.
El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural lo ha anunciado hoy durante su visita a la granja de Chinchilla de Montearagón, donde ha resaltado que es “este Gobierno el que ha recuperado realmente la labor de reproducción de la perdiz roja en estas instalaciones que estuvieron abandonadas durante la legislatura pasada”.
De esta forma, es aquí donde se realiza la recuperación genética de la especie, tras una inversión de 100.000 euros durante esta legislatura para la mejora de las instalaciones, la contratación de de personal y la obtención de individuos puros, contando ya en la actualidad con 850 parejas reproductoras.
Esta cuantía económica se unirá a los 218.000 euros comprometidos hasta el año 2021 por el Gobierno de Castilla-La Mancha que, según ha explicado Francisco Martínez Arroyo, servirán para que el centro “sea viable”.
A esta línea de pureza de la perdiz roja se le une la reintroducción de la especie en su medio natural para lo cual “en los próximos meses se publicará la orden de precios públicos de huevos y pollos de perdiz autóctona para que puedan comprarlos las granjas comerciales”, consiguiendo así que el animal se introduzca de nuevo en el campo castellano-manchego, algo que “se había perdido”, debido “sobre todo a la hibridación con la perdiz turca”.
Martínez Arroyo ha resaltado que a esta medida se le sumará una normativa para que las propias granjas apuesten por esta especie autóctona y “así desaparezca la perdiz híbrida nacida de la mezcla entre la autóctona y la turca, que es la que han incorporado las granjas”, algo que ya ha despertado “interés”, ha significado.
Ayudas para favorecer el anidamiento en zonas ZEPA
El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, ha recordado que la perdiz es un ave esteparia y por ello, dentro de este plan, se prevé también la recuperación de los hábitats propios de la especie.
Esto se consigue, ha explicado, mediante las actuaciones en más de 46.000 hectáreas de Zona Especial de Protección de Aves, ZEPA, para las que se ha puesto en marcha una línea de ayuda a los agricultores de herbáceos de secano de 208,2 euros por hectárea, con una dotación de 47,5 millones de euros en total, con el que se logra un doble objetivo como son mantener la actividad agraria a la vez que se ponen en práctica medidas agroambientales que permitan a la perdiz y otras aves nidificar en estas zonas esteparias.
Así, con este plan de recuperación de la perdiz roja, el Gobierno regional demuestra su apuesta “decidida por la recuperación de esta especie tan emblemática de la región, tras años de abandono”.
Durante la visita, Francisco Martínez Arroyo ha estado acompañado por el director provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo rural, Manuel Miranda; miembros de la corporación municipal, así como de los jefes del servicio de Política Forestal y Espacios Naturales y de la sección de Caza y miembros del Cuerpo de Agentes Medio Ambientales de Castilla-La Mancha.