La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, ha manifestado su disconformidad con la postura del líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, en relación con el trasvase Tajo-Segura. Padilla cuestiona la preferencia que Feijóo parece otorgarle a la región del Levante, mientras presuntamente descuida los intereses de la cuenca cedente y de Castilla-La Mancha.
Según Padilla, es llamativo que el líder del PP, con aspiraciones a gobernar el país, tenga una actitud parcial hacia una región y se olvide de la solidaridad que Castilla-La Mancha ha mostrado durante cuarenta años. Ella sostiene que más de dos millones de ciudadanos castellano-manchegos también tienen derechos sobre el recurso hídrico.
La representante del gobierno castellano-manchego señala la importancia de las decisiones judiciales en esta cuestión, refiriéndose a las cinco sentencias del Tribunal Supremo que exigen el establecimiento de caudales ecológicos en el río y la aplicación efectiva de tales medidas. Apunta que la ejecución de trasvases sin modificar previamente las reglas de explotación es una situación dolorosa, ya que desafía tanto los mandatos europeos como los dictámenes del máximo tribunal español.
Padilla finaliza exigiendo que se realicen modificaciones de manera urgente a las reglas de explotación, en línea con lo que se ha establecido sobre los caudales mínimos que deben mantenerse, buscando así un equilibrio que beneficie tanto al Levante como a la cuenca cedente y a Castilla-La Mancha.
