En un acto cargado de simbolismo y compromiso institucional, la Diputación de Ciudad Real, encabezada por su presidente Miguel Ángel Valverde, participó este martes en la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. El evento, organizado conjuntamente por las cuatro administraciones, tuvo lugar en Ciudad Real, bajo la coordinación del Ayuntamiento local, y reunió a destacados representantes políticos y sociales para manifestar su firme oposición a la violencia machista.
La intervención central del evento fue realizada por el alcalde de la capital, Francisco Cañizares, quien dirigió su discurso a representantes del Gobierno de España, del Gobierno regional y de la Diputación Provincial. La delegación del Gobierno nacional incluyó a David Broceño, subdelegado del Gobierno en Ciudad Real, mientras que la representación regional estuvo a cargo de Blanca Fernández, delegada de la Junta en la provincia.
Al acto se unieron también diversas autoridades, entre ellas Rocío Zarco, portavoz del Gobierno de la Diputación; María Isabel Mansilla, diputada provincial; y figuras del poder judicial y de las fuerzas de seguridad como María Jesús Alarcón, presidenta de la Audiencia Provincial, y Miguel Ángel Carballo, fiscal jefe. Estos líderes, junto a representantes de ONG, asociaciones de mujeres, entidades culturales y colectivos sociales, respaldaron una jornada que subrayó la urgencia de combatir esta lacra que cobra vidas cada año.
Durante el evento, se destacó la importancia de mantener una respuesta institucional firme y coordinada para enfrentar la violencia de género, considerada una de las mayores violaciones a los derechos humanos en la actualidad. Se insistió en la necesidad de fortalecer la prevención, mejorar la detección temprana y garantizar la protección de las víctimas. Además, se subrayó el papel crucial de la educación y concienciación en la construcción de una sociedad libre de violencia.
Uno de los momentos más emotivos del acto fue el minuto de silencio guardado en memoria de las víctimas y la simbólica referencia a las flores en el escenario, que representaron tanto a las mujeres asesinadas como a los menores afectados por la violencia vicaria. Estos gestos enfatizaron el alcance de una jornada que interpela no solo a las instituciones, sino también a toda la ciudadanía.
La ceremonia también contó con la participación artística de María Molina, cuya música invitó a la reflexión y resonó profundamente entre los asistentes. Su actuación fue uno de los puntos culminantes del evento, que cerró con un renovado compromiso del presidente de la Diputación hacia la lucha contra la violencia de género. En este sentido, subrayó la gestión de la institución provincial de una Casa de Acogida para Mujeres Víctimas de Violencia, destacando los avances recientes en la estabilización y mejora de las condiciones laborales del personal, lo que, en última instancia, beneficia a las usuarias y sus familias.
Con esta jornada, las autoridades de Ciudad Real reafirmaron su determinación de seguir trabajando hacia una sociedad donde todas las mujeres puedan vivir libres y seguras, con plenas garantías de sus derechos.
Fuente: Diputación de Ciudad Real

















