El inicio del nuevo programa de Carlos Latre en Telecinco, ‘Babylon Show’, prometía una renovación del entretenimiento en el acceso al horario estelar. Sin embargo, tras su estreno el pasado 26 de agosto, la realidad ha sido otra. A pesar de no comenzar con mal pie, el show ha experimentado un descenso progresivo de audiencia, especialmente marcado tras el regreso de programas competidores como ‘El hormiguero’, ‘First Dates’ o ‘El intermedio’. Ahora, con la llegada de David Broncano a TVE, la competencia se intensifica aún más.
En respuesta a esta situación, Telecinco ha implementado estrategias para proteger sus contenidos más fuertes, especialmente con ‘Gran Hermano 2024’. Esto incluyó el adelanto de la hora de finalización de ‘Babylon Show’ a las 22:40 horas, recortando su duración para no solaparse con importantes lanzamientos del canal. A pesar de estos esfuerzos, el último movimiento ha sido aún más drástico.
Telecinco ha tomado la decisión de reducir la presencia de ‘Babylon Show’ en su programación, quitándolo de las noches del jueves y viernes y adelantando la emisión de ‘Gran Hermano 2024’ y ‘¡De viernes!’. Esto deja al programa de Latre y compañía emitido solo tres días a la semana, una situación que pone de relieve la impaciencia del canal con el formato tras apenas dos semanas al aire.
La estrategia de Mediaset España apunta a priorizar aquellas ofertas que han demostrado un mejor rendimiento, dejando a ‘Babylon Show’ en una posición comprometida. La cadena busca mejorar las cifras en ese valioso tramo del access prime time, pero la necesidad de ajustar contenidos a la reacción de la audiencia ha llevado a esta reducción significativa en la apuesta por el show de Carlos Latre.
Este ajuste subraya la feroz competencia en la televisión española por captar la atención de los espectadores en los momentos previos al horario de máxima audiencia. La capacidad de adaptación y respuesta rápida ante las dinámicas del mercado televisivo resultan clave para mantenerse relevante, algo que ‘Babylon Show’ ha experimentado en carne propia.
Con la reciente decisión, Carlos Latre y su equipo enfrentan el reto de redefinir y fortalecer su programación para mantenerse en pie ante la adversidad. El precedente de programas que no han logrado superar las primeras semanas en antena es un recordatorio de las exigencias del público y los desafíos de permanecer en el competitivo mundo de la televisión actual.
