Isabel Infantes, una fotoperiodista originaria de Toledo y nacida en 1985, ha experimentado un ascenso notable en su carrera durante los últimos años, lo que ha culminado en un impresionante 2023. Después de dedicar más de diez años de su vida al fotoperiodismo, Infantes ha trabajado en notorios eventos internacionales para agencias prestigiosas como Reuters y Europa Press. Ha documentado, a través de su lente, momentos críticos como los cambios de gobierno en Inglaterra — presenciando las transiciones de Boris Johnson a Liz Truss y de esta a Rishi Sunak —, la muerte de la Reina Isabel II y la triunfal victoria de la Selección Femenina de Fútbol en Australia, capturando incluso el controvertido beso del presidente de la Federación, Luis Rubiales, a la jugadora Jenni Hermoso.
En un recuento de su trayectoria, Infantes comparte con Europa Press el inicio de su pasión por el arte, sus raíces creativas, y su formación en Bellas Artes en Cuenca, que la guiaron hacia su destino profesional en el fotoperiodismo. Menciona con cariño a Luis Bailón, un profesor que recientemente falleció y que fue una fuente de inspiración para ella y sus compañeros. Tras explorar diversas oportunidades, Infantes finalmente se estableció en Londres, donde entabló contacto con colegas y dio sus primeros pasos en la industria de las agencias de información.
El 2022 marcó una etapa importante en su carrera. Debido a una corazonada, Infantes retornó a la capital británica justo en la semana en que Boris Johnson dejó su posición como primer ministro, seguido del breve mandato de Truss y el eventual nombramiento de Sunak. Este fue un periodo de intensa actividad profesional, en el que tuvo la oportunidad de cubrir el funeral de Isabel II, documentando emociones colectivas y escenas de un país en duelo.
Sus conmovedoras imágenes de la multitud rindiendo homenaje a la difunta monarca y las colas para visitar el cuerpo en Westminster pasarán a formar parte de su legado fotográfico. Reconoce que estos acontecimientos han marcado un punto de inflexión en su carrera y admite que nunca esperó vivir un evento de semejante magnitud.
La destacada cobertura de Infantes en estos sucesos históricos aumentó su visibilidad, abriéndole puertas a nuevos encargos, incluyendo eventos deportivos de alto perfil como Wimbledon y el Mundial Femenino en Australia. Recuerda especialmente la victoria del equipo de fútbol femenino, un hito empañado por el incidente del beso de Rubiales, que nadie logró capturar en cámara. Este episodio es un recordatorio para Infantes del valor de estar siempre listos para disparar la cámara, ya que los momentos más significativos pueden surgir cuando menos se espera.
Mirando adelante, Infantes se encuentra llena de optimismo, previendo un «muy movido» 2024 en su especialidad del fotoperiodismo deportivo, especialmente con eventos como la Eurocopa y los Juegos Olímpicos de Madrid en el horizonte. Con la experiencia acumulada y la expectativa de futuros proyectos, Infantes aspira a seguir vinculándose con eventos de calibre mundial y a enriquecer su «memoria visual» con más capturas impactantes que narran la historia en imágenes.
