Castilla-La Mancha y la Dirección General de Tráfico (DGT) formarán a un centenar de policías locales en la utilización de los sistemas de medición de la velocidad de los vehículos en circulación, los conocidos radares, así como las distintas herramientas y complementos usados para tal fin.
Se trata de la primera vez que la Escuela de Protección Ciudadana, dependiente de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, colabora en este curso, esencial para que los agentes municipales puedan conocer tanto los aparatos medidores como la legislación que se aplica.
Del total de policías locales, una veintena de ellos, procedentes de distintos puntos de la provincia de Toledo, han adquirido ya los conocimientos técnicos necesarios para utilizar los sistemas de medición de la velocidad de los vehículos en circulación. Los miembros de los cuerpos de seguridad local han podido formarse en estas técnicas durante el curso sobre ‘Equipos de Medición de Velocidad’, que se ha desarrollado esta semana en Toledo.
Este curso ha sido posible gracias a la colaboración entre la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas y la Dirección General de Tráfico, dependiente del Ministerio del Interior. De hecho, ha sido este último departamento estatal el que ha cedido sus instalaciones en la capital toledana para llevar a cabo este curso, que ha impartido el personal de formación de la DGT, utilizando también los equipos propios de la Dirección General de Tráfico.
En la inauguración han estado presentes el Director General de Protección Ciudadana, Emilio Puig, y el Jefe Provincial de Tráfico de Toledo, Francisco Javier Villalba. Puig ha destacado la importancia de este tipo de actuaciones formativas que, además, está relacionada con los cambios normativos que afectan, entre otras cuestiones, a la nueva regulación de los límites de velocidad en las vías urbanas y que entrarán en vigor el próximo 11 de mayo.
El director general ha aprovechado el evento para recordar que “el exceso de velocidad produce un aumento de muertes y lesiones graves, afectando especialmente a usuarios vulnerables de las vías, como pueden ser peatones, motoristas, ciclistas y usuarios de vehículos de movilidad personal”. Y ha recalcado que, “además de trabajar en los campos de la formación, la educación, la concienciación y mejora en infraestructuras y vehículos, es imprescindible trabajar en la vigilancia del cumplimiento de las normas”.
En esta acción formativa los policías locales han profundizado en el manejo de los equipos de medición de velocidad y los diferentes modelos que existen, la obtención de los informes para tramitar los procedimientos sancionadores a las personas que incumplan los límites de velocidad en las vías y, por último, la gestión y tramitación de la cesión de los propios equipos de medición de velocidad disponibles a través de la Dirección General de Tráfico.
Además, durante el desarrollo del curso se han llevado a cabo prácticas para conocer los procedimientos y saber cómo se hacen las mediciones dependiendo del equipo disponible y la diferencia de vehículo o ciclomotor a medir. Entre teoría y práctica, los participantes han recibido un total de ocho horas de formación específica sobre los radares de velocidad.
La primera edición ha contado con la presencia de policías locales procedentes de trece municipios toledanos, destacando la capital regional, con tres agentes; Cabañas de la Sagra, La Puebla de Almoradiel, Mora, Ontígola y Yuncos, que han aportado dos policías locales en cada caso; y, finalmente, desde Almorox, Cobeja, Corral de Almaguer, Illescas, Sonseca, Torrijos y Yepes ha acudido un participante por municipio.
En total se desarrollarán cinco ediciones de esta acción formativa, que dispondrá de una veintena de plazas por provincia con las que se espera formar a un centenar de policías locales de Castilla-La Mancha. La última se impartirá en las instalaciones de la Dirección General de Tráfico de Albacete el 13 de mayo.