La ciudad de Southport, en el noroeste de Inglaterra, se encuentra en estado de conmoción tras el trágico suceso ocurrido el pasado lunes en un club de vacaciones con temática de Taylor Swift, donde un adolescente de 17 años ha sido acusado de asesinar a tres niñas. La Policía de Merseyside informó que el joven comparecería este jueves ante la Corte de Magistrados de Liverpool para enfrentar los cargos presentados en su contra, los cuales incluyen tres asesinatos y el intento de asesinato de otros menores.
Las víctimas fueron identificadas como Bebe King, de 6 años; Elsie Dot Stancombe, de 7, y Alice Dasilva Aguiar, de 9. Estas jóvenes participaban en un taller de música organizado con motivo de las vacaciones estivales cuando fueron gravemente heridas en el ataque. Además, otros ocho niños y dos adultos resultaron heridos, algunos de ellos en estado crítico, y actualmente se encuentran recibiendo atención médica en el hospital.
La jefa de policía de Merseyside, Serena Kennedy, declaró que el adolescente ha sido acusado de los asesinatos de Bebe, Elsie Dot y Alice, además de enfrentar 10 cargos de intento de asesinato y posesión de un cuchillo. El incidente ha causado gran consternación tanto en la comunidad local como en el país.
El acusado, cuya identidad no ha sido revelada por ser menor de edad, nació en Gales de padres ruandeses y residía en el pueblo de Banks, en las afueras de Southport. Ha sido puesto bajo custodia a la espera de su comparecencia en el juzgado.
Este trágico suceso ha provocado una oleada de protestas en Londres, donde más de 100 personas fueron detenidas tras enfrentamientos con la policía. Algunos manifestantes intentaron romper el cordón policial para llegar hasta el Parlamento, lo que ha llevado al primer ministro británico, Keir Starmer, a convocar una reunión con representantes de distintas fuerzas policiales para abordar la situación.
La comunidad de Southport y el país en su conjunto se encuentran en luto por la pérdida de tres jóvenes vidas y en búsqueda de respuestas frente a este acto de violencia incomprensible. La sociedad clama por medidas efectivas para prevenir futuros incidentes y garantizar la seguridad de los menores.
