La consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, aseguró que la nueva Ley de Educación, próxima a elevarse a las Cortes Generales, “es una norma moderna, valiente y actualizada al siglo XXI “.
En un debate general, que tuvo lugar en las Cortes de Castilla-La mancha, la consejera en primer término quiso señalar que la Ley todavía está en trámite parlamentario y por lo tanto sujeta a enmiendas, por lo que pidió un esfuerzo a todas las fuerzas políticas para intentar llegar al mayor acuerdo posible, abandonando posiciones partidistas.
Independiente de estas consideraciones, la titular de Educación aseguró que “la aplicación de esta ley traerá grandes beneficios para el alumnado y el profesorado castellano-manchego, para los propios centros educativos y para el proyecto educativo que defiende nuestra Comunidad Autónoma”.
Rodríguez quiso remarcar que por primera vez una norma educativa tiene como principios rectores los derechos de la infancia, a lo que se debe sumar que la norma ofrece mayor personalización del aprendizaje y una preocupación por la educación para el desarrollo sostenible, incluyéndola en todos los planes y programas educativos de la totalidad de la enseñanza obligatoria.
Otra característica de esta nueva Ley, que quiso poner en valor la funcionaria, es que desde Primaria el alumnado se formará en Educación en Valores Cívicos y Éticos, con contenidos que versarán sobre derechos humanos, derechos de la infancia, la Constitución Española, igualdad entre hombres y mujeres y sobre el valor del respeto a la diversidad.
La expansión de la digitalización, apuntó Rodríguez, es otro de los desafíos que recoge la LOMLOE así como la modernización del currículum, haciendo que sea más flexible y competencial con medidas para estudiantes con necesidades educativas especiales, potenciando las segundas oportunidades del alumnado.
“Una ley sin estándares de aprendizaje, que rebaja la carga burocrática a los docentes”
“Esta Ley apuesta por la calidad, teniendo como ejes la equidad y la excelencia”, ha explicado la consejera de Educación. Además, ha añadido, “pretende garantizar a estudiantes, profesorado y centros un modelo inclusivo y moderno sin itinerarios segregadores y reválidas”.
En esta dirección, la consejera de Educación explicó que se eliminarán los itinerarios de 4º de la ESO, “de forma que cualquier opción conducirá al mismo título de graduado. Además, dará respuesta a los alumnos que superen la FP Básica, que también recibirán la titulación en ESO”.
Por otra parte, introduce evaluaciones-diagnóstico en 4º de Primaria y 2º de la ESO, para que los centros y docentes desarrollen planes estratégicos de mejora continua y no para establecer rankings entre los centros educativos como se pretendía en la LOMCE.
Rodríguez explicó que con esta Ley se eliminará la evaluación de los estándares de aprendizaje, reduciendo la carga burocrática de los centros educativos.
Por otra parte, la consejera resaltó que la nueva Ley de Educación fomentará la participación, ya que los consejos escolares volverá recuperar la capacidad para aprobar y evaluar los documentos programáticos o los presupuestos de sus respectivos centros.
“La LOMCE incrementó el gasto de las familias y provocó más repeticiones”
Además, la titular de Educación recordó a los parlamentarios que la ley actualmente vigente, la LOMCE, nació sin el consenso de la comunidad educativa y aumentó las repeticiones en Primaria, disminuyó las graduaciones en ESO y Bachillerato e incrementó el gasto de las familias, “que además tuvieron que sufrir con el Ejecutivo del PP recortes, como la eliminación de becas de comedor, de la gratuidad de los libros de texto, etc.”.
En contraposición, ha añadido Rodríguez, la nueva Ley, la LOMLOE, mejorará en capítulos como la Educación Infantil de 0 a 3 años “imprimiéndole un carácter pedagógico”; la Educación Primaria “dando a los centros mayor autonomía” y la Educación Secundaria “eliminando los itinerarios educativos”.
En Bachillerato, ha señalado la consejera, la nueva norma destaca por “la eliminación de las reválidas y la introducción de la Filosofía en el curriculum. Y la Formación Profesional, se verá fuertemente reforzada”.
Para el desarrollo de esta Ley, la consejera de Educación aseguró que en la misma “se compromete un incremento de la financiación hasta alcanzar el 5 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) en 2025, con acciones como el refuerzo de los planes de cooperación territorial y la creación de un modelo de becas que garantice una igualdad real de oportunidades”.