Una visita al Centro de Coordinación Operativa Regional de Incendios (COR) realizó el consejero de Desarrollo Sostenible del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Luis Escudero. Aprovechó la ocasión el consejero para agradecer la labor y el esfuerzo de todos los trabajadores que año tras año combaten los incendios forestales, los agentes medioambientales, los técnicos y los empleados de la empresa pública Geacam.
El consejero aprovecho su visita al Centro de Coordinación Operativa Regional de Incendios (COR) en el que se agrupan los Centros de Coordinación Operativa Provinciales en comunicación permanente con el 12, para manifestar su gratitud en nombre del Gobierno de Castilla-La Mancha y de todos los castellano-manchegos, por el trabajo que realizan en la prevención y extinción de incendios forestales durante los 365 días del año.
También ha querido enviar un mensaje de “cariño y solidaridad” en el aniversario del incendio de Ribas de Saelices (Guadalajara) que ocurrió el 16 de julio del 2005, a todos los familiares de los 11 combatientes que fallecieron mientras luchaban por contener el fuego. Escudero también ha querido recordar el incendio de San Martín de Boniches (Cuenca) acaecido hace 25 años.
Se ha referido Escudero, al déficit significativo de precipitaciones y a las altas temperaturas con episodios de incorporación de masas de aire subsahariano, que crean condiciones de riesgo extremo de incendio forestal en Castilla-La Mancha, por lo que ha dicho que “Esta campaña de incendios está siendo más crítica que la anterior por las altas temperaturas y, por ello, apelamos a los ciudadanos para que asuman que todos tenemos una tarea como agentes en la prevención de incendios, extremen la precaución y atiendan los mensajes de los agentes medioambientales para reducir la propagación de incendios”.
El consejero de Desarrollo Sostenible, también ha querido señalar durante su visita al Centro de Coordinación Operativa Regional de Incendios (COR), las condiciones que provocaron el 28 de junio pasado, los incendios más significativos de esta campaña. El fuego que sufrieron los aledaños de la ciudad de Toledo, en las proximidades del paraje de Montesión, afectó a aproximadamente 1.200 hectáreas de monte bajo y matorral, mientras que el incendio de Almorox quemó 720 hectáreas en este término municipal y 2.000 en las localidades madrileñas de Cenicientos y Cadalso de los Vidrios. Las condiciones extremas en cuanto a climatología y disponibilidad del combustible vegetal a primeros de 2019 obligaron a las unidades de funcionamiento del Servicio Operativo de Extinción de Incendios Forestales (SEIF) a adoptar medidas extraordinarias en cuanto a la limitación de actividades susceptibles de originar fuegos y en cuanto a la dotación de dispositivo adicional de extinción.
85 millones de euros son los que destina el Gobierno regional para la prevención y extinción de incendios en 2019. La actual campaña de incendios cuenta con la participación de alrededor de 3000 trabajadores, entre personal funcionario y laboral, y los trabajadores de la empresa pública Geacam, además de 25 medios aéreos. Desde el inicio de la pasada legislatura, los trabajadores de Geacam realizan tareas preventivas de cuatro a ocho meses. Esto implica trabajar durante los doce meses del año. De esta forma, se ha duplicado el número de superficie de tratamiento preventivo cumpliendo así la máxima, tal como ha puntualizado Escudero, de que “los incendios también se apagan en invierno”.
En este sentido, si durante 2018 los efectivos de Geacam pudieron ejecutar actuaciones preventivas en 8.200 hectáreas de terreno forestal y el repaso de 364 hectáreas de cortafuegos y 325 kilómetros de vías de penetración, con una inversión superior a los 35 millones de euros, el consejero de Desarrollo Sostenible avanzó que estas cifras van a ser superadas este año. En parte, debido a una climatología que va a permitir un mayor número de días de trabajo en el medio natural.
Por último, Escudero recalcó que cerca del 40 por ciento de los incendios se producen por negligencias y causas accidentales. “Esto significa que casi el 40 por ciento de los incendios los podemos evitar, por lo que pido a los ciudadanos que extremen la precaución”, ha dicho. No hacer fuego en el medio natural o utilizar maquinaria que pueda producir deflagraciones o chispas, no fumar ni arrojar colillas y evitar salir de los caminos autorizados con los vehículos cuyos tubos de escape calientes en contacto con el pasto puedan producir un incendio son algunas de las principales recomendaciones preventivas.