En el marco de FENAVIN, la feria nacional del vino celebrada en Ciudad Real, se ha generado un espacio de rico diálogo en el stand de la Diputación Provincial, protagonizado por José Carlos Capell, presidente de Madrid Fusión y destacado crítico gastronómico. En la conversación, Capell ha estado acompañado por los renombrados chefs Miguel Carretero, del restaurante Santerra, y Rubén Sánchez Camacho, de El Epílogo. La charla, moderada por el director de FENAVIN, Manuel Juliá, se concentró en la conexión a menudo subestimada entre la gastronomía y el vino, así como en los retos de acercar el mundo vinícola a las nuevas generaciones.
Capell abrió el debate señalando la falta de interés de muchos cocineros españoles en el vino, una parte esencial de la experiencia culinaria que, según sus palabras, sigue siendo subestimada. «Hay muy pocos cocineros a los que les interese de verdad el vino», afirmó, invitando a una reflexión colectiva sobre el papel de la gastronomía en la promoción de la cultura vinícola.
Los chefs Carretero y Sánchez Camacho, ambos con raíces en el mundo de la vid, defendieron la necesidad de educar a los comensales desde la carta de vinos. «Nosotros no imponemos, proponemos», expusieron, alegando que su objetivo es introducir a los clientes a los vinos de Castilla-La Mancha, región que ofrece opciones mucho más allá de sus clásicos. La charla también abordó la falta de simbiosis entre la cocina y la sumillería, lamentando que frecuentemente los discursos en sala sean tan extensos que alejen a los clientes.
Reflexionando sobre el consumidor actual, se destacó la necesidad de que los profesionales estén preparados para guiar al cliente sin abrumarlo, sugiriendo un enfoque más honesto al presentar el vino. Capell subrayó que la narrativa vinícola debe ser concisa y comprensible, al tiempo que aplaudió la incorporación de la voz del cocinero en eventos como FENAVIN.
Uno de los temas más críticos fue el descenso del consumo de vino entre los jóvenes, con la preocupación de que España, a diferencia de países como Italia o Francia, está perdiendo el interés de las nuevas generaciones. Los cocineros defendieron su papel como prescriptores y abogaron por dar visibilidad a proyectos pequeños y singulares que puedan sorprender y emocionar.
La Diputación de Ciudad Real, organizadora de este encuentro, refuerza así su compromiso por visibilizar el talento local. Al concluir el acto, el presidente de la Diputación y de FENAVIN, Miguel Ángel Valverde, junto con otras autoridades, cerraron el evento destacando la importancia de estas iniciativas para fomentar el diálogo entre la gastronomía y el vino.
Fuente: Diputación de Ciudad Real
