La Guardia Civil del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) ha multado a un individuo en El Casar, Guadalajara, por no gestionar adecuadamente el cadáver de su perro y no informar al veterinario. Los agentes encontraron al animal arrojado a un lado de un camino muy transitado, en estado de descomposición. Según ha informado la policía, esta es una de las 114 infracciones relacionadas con la sanidad animal y los animales domésticos que los agentes del Seprona han registrado en Guadalajara este año.
Las acciones abarcan desde la investigación de delitos de maltrato animal hasta la denuncia de conductas relacionadas con la identificación inadecuada de los animales, la falta de vacunación y desparasitación, y las deficientes condiciones higiénico-sanitarias de las instalaciones donde viven los animales.
En Pioz, un individuo vivía con dos gatos y dos perros en un vehículo sin tomar ninguna medida higiénico sanitaria. Además, en la misma localidad, varios perros potencialmente peligrosos no estaban registrados, no tenían la cartilla sanitaria correspondiente y su dueño no tenía la licencia ni el seguro necesario, como exige la legislación vigente. En otra ocasión, los agentes encontraron a un cachorro en una explotación agrícola en la localidad de Málaga del Fresno, en terribles condiciones y afectado de sarna y parásitos.
Con la modificación del Código Penal, se han introducido nuevas agravantes al delito de maltrato animal que permiten una mayor aplicación de las penas y la adopción de medidas como el cambio en la custodia y cuidado del animal. La nueva Ley de Bienestar Animal también incluye una serie de infracciones en materia de protección y derechos de los animales, con sanciones máximas de hasta 10.000 euros por infracciones leves, 50.000 euros por infracciones graves y hasta 200.000 euros por infracciones muy graves.
