El Gobierno de Castilla-La Mancha va a proceder judicialmente y acudirá a la Fiscalía y a los jueces en el caso de varios de los incendios registrados en la región y que han sido «provocados claramente por algo más que una negligencia», con el fin de que no solo caiga el peso de la ley en las personas que han actuado con negligencia y han incumplido las normas sino para que terminen sufragando los costes.
Así lo ha expresado el jefe del Ejecutivo de la región, Emiliano García-Page, en una visita a Molina de Aragón en la que, en referencia a los incendios que está padeciendo la región, y más específicamente aquellos que hayan podido generarse a consecuencia del incumplimiento de las normas fijadas durante esta ola de calor y en los que detrás pudiera estar el hecho de haber usado una cosechadora en horas en las que no se debería haber hecho, ha «avisado» de que van a tener que terminar planteándose «incluso» con las organizaciones que protegen los intereses del mundo agrario y ganadero una «normativa específica» de cara a futuros años.
«Algo tenemos que hacer. De momento tenemos una medida, que es prohibirlo, y hay algunos que deliberadamente han estado trabajando, saltándose las normas», ha abundado, refiriéndose más concretamente a los propietarios de las tierras y no tanto a los trabajadores de las cosechadoras.
Y precisamente, ante la prohibición del uso de maquinaria agrícola y cosechadoras en los horarios marcados de máxima hora de calor, ha lamentado que haya habido excepciones que no hayan actuado así pero «tenemos atestados de la Guardia Civil que funcionan muy bien y de los agentes forestales que ya dejan muy claro que hay algunos que se han saltado la prohibición a la torera».
Según García-Page, esta actuación no solo ha ocasionado «muchísimos daños» a la naturaleza y a las propiedades sino que, en algún caso, «se ha estado a punto de ocasionar accidentes con riesgo para las vidas humanas».
«Vamos a proceder judicialmente en varios de los siniestros que ha habido en la región», ha reiterado. Y aunque ha explicado que ya se puede decir que los cinco fuegos más relevantes «están en vías de extinción», también ha manifestado que «no podemos olvidar, bajo ningún concepto». «Y a la gente que se salta a la torera las leyes y que termina haciendo daños al conjunto por un interés que no tiene justificación ninguna», ha insistido.
«Vamos a ir con mucha fuerza porque no podemos consentir este tipo de toreos. De hecho, si el comportamiento fuera generalizado tendríamos que tomar medidas mucho más drásticas», ha reiterado el presidente.
A preguntas de los periodistas, ha admitido que en el caso del incendio de Cerezo de Mohernando, es uno de los que ha podido tener un origen agrario, pero ha incidido que no ha sido el único y que debe actuar la justicia. «Los errores se pueden entender en algún momento determinado, pero no se puede incumplir la ley y estamos obligados perseguir a quien simplemente está delinquiendo y no tiene vuelta de hoja», ha subrayado.
No ha querido referenciar en personas concretas estos sucesos pero sí ha abundado en que desde el Gobierno regional «se va a perseguir» a quien incumple las normas porque «esto cuesta mucho dinero a todos los españoles y castellanomanchegos y la Administración se gasta una millonada, y hay quien ha perdido casas».
Por último, García-Page ha hecho un llamamiento a la prudencia, tras explicar que este año se ha incrementado un 50% el número de conatos de incendios y, aunque el 86% no han pasado de conato, cree que es fundamental coger los fuegos a tiempo, poniendo especialmente en valor el trabajo de los servicios con los que cuenta Castilla-La Mancha y su despliegue no solo en la Comunidad sino por toda España, para ayudar tanto en Castilla y León, Extremadura, Madrid, Aragón y Cataluña, entre otras.