La jornada laboral en las instalaciones de Digitex-Talavera vivió este viernes una significativa interrupción, luego de que la práctica totalidad de su plantilla presencial decidiera secundar los paros de una hora por turno convocados por el comité de empresa. Esta medida de protesta busca denunciar la continua degradación de las condiciones laborales desde que el gigante Konecta se hizo con la propiedad del call center.
Desde primeras horas de la mañana, los empleados de Digitex-Talavera dejaron clara su insatisfacción con la situación actual, marcada por un empeoramiento palpable en sus condiciones de trabajo. “Es insostenible continuar en estas circunstancias. Lo que antes era una jornada laboral asumible se ha convertido en un auténtico suplicio”, señaló uno de los trabajadores, visiblemente afectado por la situación.
La manifestación se llevó a cabo en un ambiente de notable solidaridad y unidad entre los empleados, quienes alzaban pancartas y coreaban consignas exigiendo mejoras inmediatas. El comité de empresa, promotor de los paros, había manifestado previamente su preocupación por la deriva que la adquisición por parte de Konecta había impuesto en la dinámica laboral del centro.
“Desde que Konecta compró la empresa, hemos visto recortes en beneficios, aumentos en las jornadas laborales y una presión insostenible para cumplir con metas cada vez más inalcanzables”, afirmó un representante del comité de empresa. Ante esta situación, los trabajadores han expresado su descontento mediante esta serie de paros, esperando que la empresa tome medidas para revertir la alarmante situación.
La protesta en Digitex-Talavera es un eco de las movilizaciones que se vienen registrando en diversos puntos del país, donde la adquisición de empresas por grandes conglomerados usualmente desemboca en modificaciones drásticas en las condiciones laborales que, según los empleados, resultan perjudiciales. Los trabajadores de Digitex-Talavera no son la excepción y su lucha se enmarca en una demanda de respeto y mejora en sus condiciones de trabajo.
Por su parte, la empresa Konecta no ha emitido aún un comunicado oficial respecto a estas denuncias ni a los paros realizados. La expectativa se centra en que la empresa dialogue con el comité de empresa para llegar a un acuerdo que ponga fin a la serie de protestas y garantice un ambiente laboral justo y digno para los empleados de Digitex-Talavera.
La situación ha puesto en evidencia una vez más la delicada relación entre la necesidad de rentabilidad empresarial y el bienestar de los trabajadores, un equilibrio que parece haberse roto en Digitex-Talavera desde la llegada de Konecta. Los próximos días serán determinantes para el futuro de las negociaciones y el rumbo que tomen las condiciones laborales en este centro de trabajo, que sigue siendo un pilar importante en la economía local.
Fuente: CCOO Castilla-La Mancha
