El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha indicado que Castilla-La Mancha “sigue apostando por las ayudas a la reestructuración y reconversión de viñedo” y la última convocatoria, cuyo plazo finalizó el 14 de marzo, ha posibilitado la solicitud de 86,7 millones de euros para la reestructuración o la subida de vaso a espaldera de aproximadamente 16.000 hectáreas pertenecientes a 4.153 viticultores castellano-manchegos.
El consejero destacó que se trata de una orden «revolucionaria», con criterios de prioridad establecidos por gobierno de Emiliano García-Page para priorizar «a mujeres, a aquellos que hagan diferenciación de la uva en función de la calidad, y a agricultores de cooperativas o bodegas que permitan una integración comercial».
Asimismo, tras el análisis de las 4.153 solicitudes, de la orden de convocatoria de ayudas para los ejercicios presupuestarios 2019 y 2020, un 25 por ciento son expedientes presentados por mujeres, con 1.053 proyectos; 3.263 son proyectos pertenecientes a viticultores que llevan su uva a cooperativas o bodegas que diferencian en el pago en función de la calidad de la uva, aproximadamente 443 pertenecen al colectivo de jóvenes incorporados con ayuda a la agricultura, 923 son explotaciones prioritarias y 455 pertenecen a una Entidad Asociativa Prioritaria de Interés Regional (EAPIR).
Por provincias, han solicitado estas ayudas 1.388 viticultores de Cuenca, 1.105 de Albacete, 985 de Ciudad Real, 664 de Toledo y 11 de Guadalajara.
Martínez Arroyo explicó que estos fondos ayudan a conseguir una mejora significativa en el tejido productivo vitícola de Castilla-La Mancha. La adaptación de producción al mercado con variedades más extensas; las mejoras en estructuras de explotación; el aumento de rentas profesionales y el relevo generacional del sector, facilitan la inversión de hombres y mujeres que apuestan al cultivo de la vid.
Variedades al alza
En cuanto a las variedades, destacan las 4.000 hectáreas solicitadas para la ‘garnacha tintorera’, una variedad “denostada” tiempo atrás, ha recordado el consejero, y que hoy está siendo muy demandada; seguida de tempranillo, macabeo, tinto pámpana blanca, bobal, garnacha tinta, chardonnay, ‘Pedro Ximénez’, sauvignon blanc o monastrell, entre otras. También son significativos los 1.842 expedientes amparados en una de las nueve denominaciones de origen de Castilla-La Mancha: Valdepeñas, La Mancha, Manchuela, Uclés, Ribera del Júcar, Méntrida, Mondéjar, Almansa y Jumilla o en la IGP Vinos de la Tierra de Castilla.
El consejero ha explicado que las ayudas para la medida de reestructuración y reconversión del viñedo se encuentran enmarcadas dentro del Programa de Apoyo al Sector Vitivinícola Español (PASVE) 2019-2021 y tienen como finalidad el aumento de la competitividad de los productores vitivinícolas, “una medida muy importante para Castilla-La Mancha que recibe aproximadamente el 51 por ciento de los fondos que hay disponibles a nivel nacional para las comunidades autónomas”.
Novedades
La convocatoria tiene novedades. Los titulares de superficies que hubieran sido beneficiadas por ayudas de convocatorias anteriores, y que ya cumplieron sus compromisos, pueden volver a solicitarlas. Esto ayuda a aliviar explotaciones que tengan problemas de cultivo que aún no alcanzaron a establecerse de forma rentable. Además hay algunas zonas vitícolas cuya dimensión reducida en el tamaño de parcelas que pueden solicitar la ayuda sin cumplimentar el requisito de 0,5 hectáreas de superficie mínima.
La fecha límite de ejecución de esta convocatoria será el 15 de junio de 2019 ó el 15 de junio de 2020, en función de la opción escogida por los viticultores para cada una de las parcelas de su solicitud.
Récord de exportación de vino
Por último, el consejero de Agricultura ha recordado que Castilla-La Mancha cerró el año 2017 con un nuevo récord de exportaciones de vino, alcanzando 643 millones de euros de facturación, lo que supone un incremento del 15 por ciento, respecto a 2016. Unas cifras que han hecho que aumente el precio del vino de Castilla-La Mancha en exportación (en euros/litro), que se incrementó también respecto a 2016 en un 14 por ciento. Estas cifras ponen de manifiesto la “pujanza de un sector que alcanza ya una facturación global de 1.200 millones de euros”, según ha señalado Martínez Arroyo.