El verano ha llegado temprano este año y se ha registrado un récord de temperaturas, haciéndose una de las primaveras más calurosas de los últimos años. El impacto del calentamiento global y la falta de lluvia han llevado a una mayor prevalencia del calor extremo cada año, lo que agrava el bienestar integral. Asimismo, la ola de calor propicia la aparición de enfermedades físicas y empeora las enfermedades crónicas como las cardiovasculares y respiratorias. Esto tiene un impacto importante también en la salud mental, generando estados de fatiga, irritabilidad, ansiedad o mal humor. El Ministerio de Sanidad ha identificado más de 4.700 muertes relacionadas con el exceso de calor entre finales de abril y comienzos de septiembre de 2022. Para minimizar los efectos negativos del calor en los grupos más vulnerables se deben tomar medidas preventivas y adaptarse a la nueva realidad estacional que puede generar malestar físico y mental. Expertos en salud de Cigna Healthcare han identificado 5 efectos que tiene el calor elevado en la salud integral y que son claves para hacerle frente: ansiedad y ecoansiedad cada vez más presentes, más problemas dermatológicos y renales, descompensaciones y empeoramiento de los síntomas en pacientes crónicos, aumento de la dificultad para dormir y bajada del rendimiento y motivación. Cigna recomienda técnicas de relajación, mantener una buena hidratación y seguir un estilo de alimentación saludable. También se pueden adaptar los espacios de trabajo y usar ventiladores para aclimatarlos.