En la actual era digital, los menores están constantemente interactuando con la tecnología. Son nativos digitales que han adoptado de forma natural su estrecha relación con una tecnología que forma parte de sus vidas desde su infancia. Los jóvenes suelen ser los primeros en adoptar las aplicaciones más innovadoras, como ChatGPT, un revolucionario chat de inteligencia artificial desarrollado por OpenAI que abre un nuevo campo de funcionalidades útiles tanto para el ámbito personal como profesional.
ChatGPT ofrece acceso a información educativa, lo que puede ayudar a los menores a obtener información y respuestas a sus preguntas. También puede ayudarlos a mejorar sus habilidades lingüísticas, gramaticales y de escritura, así como a practicar la formulación de preguntas y la expresión de ideas de manera clara y coherente. Además, puede ser una herramienta de entrenamiento para exámenes, ya que puede generar ejercicios, problemas y preguntas específicas para un examen y corregir después los resultados, lo que permite al estudiante saber cuáles son sus fallos y qué debe repasar.
Sin embargo, también existen desventajas y riesgos de seguridad en el uso de ChatGPT por parte de menores. Aun cuando se han implementado medidas para filtrar contenido inapropiado, existe la posibilidad de que ChatGPT pueda proporcionar contenido o respuestas no adecuados para los menores. Además, ChatGPT genera respuestas basadas en patrones y datos previos, lo que significa que no siempre puede garantizarse la veracidad o exactitud de la información proporcionada. También se deben considerar los riesgos de privacidad, ya que todas las interacciones con ChatGPT quedan registradas y pueden ser examinadas por los desarrolladores de OpenAI para continuar entrenando esta herramienta.
Eduardo Cruz, CEO y co-fundador de Qustodio, la plataforma líder mundial en seguridad y bienestar digital para familias, recomienda a los padres educar a los menores en el uso responsable de la tecnología y supervisar su comportamiento en línea para que puedan beneficiarse del potencial de ChatGPT sin poner en riesgo su seguridad. Los padres deben enseñar a los menores a no proporcionar información personal identificable y a ser cautelosos al compartir cualquier tipo de datos sensibles. En general, el uso de ChatGPT por parte de menores puede ser beneficioso siempre y cuando se tomen las medidas necesarias para garantizar su seguridad en línea.
