En un ambiente cargado de fervor y tradición, el presidente de la Diputación de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, encabezó su participación en una magna procesión en honor a la Virgen del Prado. Este evento se llevó a cabo para conmemorar el 425 aniversario de la creación de la Hermandad y los 75 años de la bendición y entronización de la imagen actual de la patrona de la capital.
Invitado por el presidente de la Hermandad, Valverde marchó junto al vicepresidente quinto, Luis Alberto Marín, en representación de la institución provincial. El evento, celebrado en la tarde-noche, coincidió con el día del Voto de la ciudad, un momento de gran significado para la comunidad.
“Importante para la capital e importante para la provincia”, destacó Valverde, subrayando la relevancia de la jornada. Resaltó también la coincidencia con la celebración del ascenso del balonmano Caserío a la Liga ASOBAL, señalando el día como una fiesta completa para Ciudad Real.
La presencia de Valverde en la procesión no solo tuvo un significado personal, sino también institucional. “Para mí, como presidente de la Diputación, es un honor estar aquí, más aún cuando la Virgen del Prado fue declarada presidenta honoraria de la Diputación”, recordó, enfatizando el vínculo histórico entre la institución y la devoción popular.
El presidente también destacó la amplia devoción que la Virgen del Prado despierta en toda la provincia. Cada 15 de agosto y durante la Octava, muchas personas de diversos pueblos acuden a rendir homenaje, reflejando la unidad y el sentido de pertenencia que esta figura inspira en la comunidad.
Valverde concluyó su participación reafirmando el orgullo y la honra que representa para él ser parte de un evento tan significativo, no solo para la capital, sino para toda la provincia. La magna procesión se consolidó así como un homenaje a la fe y a la historia compartida de Ciudad Real y sus habitantes.
Fuente: Diputación de Ciudad Real
