La Unión General de Trabajadores (UGT) ha expresado su profunda consternación tras un trágico accidente laboral en Alcolea de Calatrava (Ciudad Real), en el que un trabajador de 40 años murió y otro de 29 resultó herido debido a una descarga eléctrica en la subestación eléctrica de Picón. Este suceso se suma a otros accidentes reportados en las últimas 24 horas en la región, incluyendo la caída de un empleado de 64 años desde una altura de seis metros en Fuensalida (Toledo) y la hospitalización de dos trabajadores en Cuenca tras un incidente en un andamio.
Javier Flores, secretario de Organización y de Salud Laboral de UGT Castilla-La Mancha, ha expresado su inquietud por la frecuencia de sucesos como este, señalando que es imperativo replantear las estrategias de prevención de riesgos laborales. Flores insistió en la responsabilidad de las empresas de asegurar entornos de trabajo seguros, así como la necesidad de proveer la formación adecuada y los recursos necesarios para prevenir accidentes.
El sindicato ha trasladado sus condolencias a los seres queridos del operario fallecido y ha ofrecido asistencia legal para cualquier necesidad que puedan tener los afectados. UGT hace también un llamado para que se realice una investigación exhaustiva sobre este último accidente con el fin de esclarecer las causas y establecer responsabilidades.
Con el lema de «cero muertes en el trabajo», UGT Castilla-La Mancha reafirma su compromiso de luchar contra la siniestralidad laboral y de perseguir el objetivo de erradicar completamente las fatalidades en el ámbito laboral.
