En un contexto marcado por la preocupación y el dolor, UGT Castilla-La Mancha ha calificado de “dramáticas” las cifras de víctimas mortales en accidentes laborales registradas durante los primeros ocho meses del año en la región. Según los datos recopilados, el número de fallecidos asciende a 32, reflejando una realidad que el sindicato considera inaceptable y que exige medidas urgentes y efectivas.
Frente a este panorama, UGT ha hecho un llamado claro y contundente a las autoridades competentes para intensificar los esfuerzos en materia de seguridad laboral. La organización sindical subraya la necesidad de aumentar el número de inspectores de trabajo, una medida que consideran fundamental para garantizar la vigilancia y el cumplimiento de las normativas de seguridad en los entornos laborales.
Además, UGT insistió en la creación de la figura del delegado territorial de prevención, un agente destinado a identificar y corregir potenciales riesgos antes de que se traduzcan en tragedias humanas. La implementación de esta figura, según el sindicato, podría ser un paso decisivo hacia la reducción de incidentes fatales y una mejora significativa en las condiciones de seguridad para los trabajadores de Castilla-La Mancha.
La situación actual, expuesta con contundencia por UGT, no solo resalta la urgencia de adoptar nuevas estrategias de prevención, sino que también pone de manifiesto las deficiencias en el sistema de inspección y control laboral. La organización advierte que sin un compromiso firme para reforzar estos aspectos, será difícil cambiar el curso de las estadísticas, que hasta ahora han mostrado un alarmante incremento en el número de muertes.
A medida que se intensifican las reuniones y negociaciones con responsables políticos y empresariales, UGT Castilla-La Mancha se mantiene firme en su compromiso de luchar por los derechos y la seguridad de los trabajadores, instando a que las promesas de mejora se traduzcan en acciones concretas. La urgencia de la situación requiere que se adopten medidas cuanto antes, con el objetivo de evitar que más familias sufran la pérdida de seres queridos en entornos laborales que deberían ser seguros para todos.
Fuente: UGT Castilla-La Mancha