La Junta de Gobierno Local ha acordado en su sesión ordinaria de este jueves prohibir el botellón en la ciudad hasta que finalice el estado de alarma como medida de prevención para evitar la propagación del COVID-19 y la aparición de posibles rebrotes.
La portavoz del equipo de Gobierno, Noelia de la Cruz, ha explicado que la medida que toma el Ayuntamiento tiene como objetivo “impedir las concentraciones de personas” y reducir el riesgo de contagio; una decisión “acorde con las medidas y directrices del Estado que nos recomiendan limitar el número de personas en diferentes eventos”.
Ante el avance en la desescalada y durante el periodo que siga vigente el estado de alarma “hemos tomado esta medida excepcional, que entra en vigor desde este mismo jueves 4 de junio para preservar la salud de las personas, prevenir la propagación del virus y evitar posibles rebrotes”.
Esta medida ha sido trasladada esta misma mañana a la Subdelegación de Gobierno y a los diferentes portavoces de los grupos políticos con representación municipal que han mostrado su conformidad con esta decisión.