La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Ciudad Real tiene previsto enjuiciar a un hombre de 57 años, identificado como P.R.R., los próximos días martes y miércoles, por presuntamente agredir sexualmente a sus sobrinas políticas, de siete y once años de edad en el momento de los hechos. La Fiscalía solicita para él una pena de 24 años de cárcel.
De acuerdo al escrito de acusación del Ministerio Fiscal, al que Europa Press ha tenido acceso, se detalla que el acusado cometió agresiones sexuales contra las menores durante el periodo comprendido entre los años 2010 y 2019. Las víctimas estaban bajo la tutela de P.R.R. y su esposa debido a su situación familiar, descrita como «totalmente desestructurada, multiproblemática y en situación de exclusión social», lo que posteriormente condujo a que pasaran a estar bajo la custodia de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, y finalmente, acogidas por sus tíos.
Los informes sugieren que el acusado abusó de su posición dentro del núcleo familiar, actuando como una figura paterna para las menores, para llevar a cabo actos sexuales indebidos. La Fiscalía sostiene que logró la colaboración de sus sobrinas mediante engaños, tratando los abusos como supuestos “juegos” y empleando el chantaje emocional. También se le acusa de utilizar el sistema de castigos y recompensas para forzarlas a practicarle masturbaciones y felaciones.
La Fiscalía describe un historial de abusos consistente y sistemático, donde las prácticas indebidas empezaron con la sobrina menor en el año 2010 y continuaron con la mayor a partir de 2011. Además de la petición de una larga condena de prisión, el Ministerio Fiscal exige que se imponga una orden de alejamiento que impida al acusado estar a menos de 500 metros de las víctimas durante 20 años y que se les compense con una indemnización de 30,000 euros a cada una por los daños morales sufridos.
Estas acusaciones, en caso de ser probadas durante el juicio, revelan la gravedad de los actos cometidos y el profundo impacto que pueden haber tenido en las jóvenes víctimas, quienes en su momento ya afrontaban circunstancias familiares adversas. La sociedad espera justicia para los delitos tan graves como los que se imputan en este caso.
