La brecha salarial continúa siendo un asunto de preocupación en diversos sectores productivos, con una incidencia particular en los ámbitos de Servicios, Movilidad y Consumo, donde las disparidades de salario alcanzan cifras inquietantes. En Castilla-La Mancha, estos sectores presentan una diferencia salarial del 31,2 %, evidenciando la necesidad urgente de adoptar medidas que promuevan la igualdad retributiva.
Dentro de la economía regional, los sectores mencionados no solo son primordiales por su contribución a la actividad económica, sino también por la cantidad de empleo generado. Sin embargo, esta última cifra se ve ensombrecida por un marco de desigualdad que todavía persiste entre los trabajadores, especialmente en términos de género. Las mujeres, en particular, siguen siendo las más afectadas por esta discrepancia salarial, un fenómeno que no es exclusivo de Castilla-La Mancha pero que aquí presenta una de sus facetas más acentuadas.
La Unión General de Trabajadores (UGT) de Castilla-La Mancha ha señalado esta problemática como prioritaria, instando a políticas más efectivas que aborden esta injusticia estructural. La organización subraya que la solución pasa no solo por el reconocimiento de la problemática, sino también por una planificación estratégica que involucre a las empresas, los sindicatos y las autoridades gubernamentales.
Mientras tanto, el mercado laboral continúa operando bajo estas desigualdades, con repercusiones significativas no solo para quienes las experimentan directamente, sino también para la economía en su conjunto. La necesidad de corregir estas diferencias es imperiosa, no solo por razones de justicia social, sino también porque un acceso equitativo a los recursos y oportunidades económicas impulsa el crecimiento económico y la cohesión social.
Fuente: UGT Castilla-La Mancha