El Servicio de Emergencias 1-1-2 gestionó durante el pasado verano un total de 51 desapariciones de personas en Castilla-La Mancha

El Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha, organismo dependiente de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, ha gestionado un total de 51 incidentes relacionados con la desaparición de personas en la Comunidad Autónoma entre los meses de mayo y septiembre, coordinando los dispositivos de búsqueda iniciados para localizar a estos ciudadanos.

El Servicio de Emergencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha moviliza y coordina un alto número de recursos en este tipo de casos. En los dispositivos de búsqueda, dependiendo de las características de cada caso, pueden participar efectivos de muy diferentes grupos de emergencia, como agrupaciones de Protección Civil y de Cruz Roja, patrullas de la Guardia Civil, efectivos de la Policía Nacional y de la Policía Local, así como agentes medioambientales, miembros de los cuerpos de bomberos, servicios sanitarios y, en numerosas ocasiones, vecinos de la zona.

Por lo que respecta a los lugares donde se han producido estos casos, destaca la provincia de Toledo, en la que, durante los meses estivales, se han registrado más de un tercio del total de incidentes de personas desaparecidas que han tenido lugar en todo el territorio de Castilla-La Mancha. En este periodo, desde el Servicio de Emergencias 1-1-2 se han gestionado 19 desapariciones en distintas localidades de esta provincia.

Por su parte, en la provincia de Ciudad Real se han registrado en el periodo estival un total de 13 casos gestionados por el Servicio de Emergencias 1-1-2 relacionados con desapariciones. En localidades de la provincia de Guadalajara se gestionaron ocho incidentes y en distintos puntos de la de Albacete, siete. La provincia de Cuenca registró el menor número de incidentes, con cuatro casos durante estos meses.

Con respecto al mes en el que tuvieron lugar estos incidentes, junio fue el peor mes al contabilizarse 13 casos en toda la región, de los que seis tuvieron lugar en la provincia de Toledo. En julio hubo que activar a los grupos de emergencia en 12 casos; en mayo hubo 11 incidentes y en septiembre se registraron un total de ocho.

Agosto, por su parte, fue el mes en el que las desapariciones coordinadas desde el Servicio 1-1-2 de Castilla-La Mancha más se redujeron, ya que se registraron en toda la región siete casos.

Resolución favorable

La gran mayoría de los incidentes por desapariciones se resuelven de manera favorable por parte de los grupos de activación movilizados y la persona afectada es encontrada en buen estado de salud y en menos de 24 horas.

Sin embargo, de los 51 casos registrados entre los meses de mayo y septiembre, en cuatro de ellos la búsqueda finalizó con el hallazgo del cadáver de la persona desaparecida.

Además, cabe destacar que buena parte de los casos registrados se producen en zonas rurales. Así, de los 51 casos gestionados tan solo 17 tuvieron lugar en las cinco capitales de provincia.

Si tenemos en cuenta el dato de la edad, una cifra muy importante de desapariciones las protagonizaron personas con más de 65 años y en algunos de los casos con edades comprendidas entre los 88 y los 95 años. En el lado contrario, un total de 15 casos de desapariciones fueron protagonizados por menores de edad, siendo todos ellos localizados.

Otro de los datos de interés es el alto número de incidentes en los que los afectados son varones, doblando prácticamente el de casos en los que las desapariciones están protagonizadas por mujeres.

Scroll al inicio