Garantizar la higiene menstrual en los centros educativos es fundamental para promover la salud y el bienestar de las estudiantes. El acceso a productos de higiene, junto con instalaciones adecuadas, son elementos clave para asegurar esta necesidad básica y garantizar la seguridad y el confort durante el periodo menstrual.
Es bien sabido que mantener una buena higiene es esencial para mejorar la salud en general, y esto no es diferente en los entornos educativos. Tener servicios higiénicos equipados con papel higiénico, jabón, higienizadores de manos, papeleras, dispensadores de papel secamanos o secadores eléctricos, son elementos básicos que contribuyen al mantenimiento de la higiene y, también, a la reputación de los centros educativos.
Sin embargo, más allá de estos elementos esenciales, hay un tema que está adquiriendo cada vez más importancia: la salud menstrual. Promovida por organizaciones como la Organización Mundial de la Salud (OMS), garantizar el derecho a la salud menstrual se ha convertido en una demanda necesaria.
Para lograr la higiene menstrual en los centros educativos, es fundamental garantizar el acceso a productos de higiene y contar con instalaciones sanitarias adecuadas. Lamentablemente, en muchos lugares aún existe falta de concienciación y educación sobre la gestión de la menstruación, lo que pone en riesgo la salud de niñas y mujeres.
En España, con la modificación de la Ley Orgánica 2/2010, se establecieron directrices claras para garantizar el acceso gratuito a productos de gestión menstrual en los centros educativos. Sin embargo, disponer de estos productos no es suficiente. Los centros también deben contar con unidades higiénicas femeninas, que son contenedores asépticos diseñados para desechar compresas y tampones de manera adecuada, evitando problemas de atascos y riesgos para la salud debido a la presencia de microorganismos en estos residuos.
Empresas especializadas en servicios de higiene, como Rentokil Initial, ofrecen dispositivos confiables y duraderos que aseguran altos niveles de protección higiénica para los usuarios. Las unidades higiénicas femeninas de Rentokil Initial cuentan con tecnología antibacteriana y un mecanismo silencioso que permite un uso discreto.
Es crucial trabajar para crear entornos seguros y limpios en los centros educativos, que reconozcan la menstruación como un asunto de salud y derechos humanos. Garantizar la higiene menstrual no solo promueve la salud y el bienestar de las estudiantes, sino que también fomenta una mayor equidad y concienciación sobre la importancia de la salud menstrual.
