Este viernes, el pleno municipal del Ayuntamiento de Talavera de la Reina se ha convertido en el epicentro de un intenso debate en el que la reprobación del vicealcalde y líder regional de Vox, David Moreno, ha acaparado la atención. La solicitud, impulsada por el Grupo Municipal Socialista (PSOE), tenía como objetivo criticar las declaraciones de Moreno en relación con la labor de la Cruz Roja y la gestión de las ayudas a los afectados por la DANA, canalizadas a través del Talavera Ferial.
La proposición de reprobación fue finalmente rechazada, con el apoyo en contra de los partidos que conforman el Gobierno local, Vox y el Partido Popular (PP), frente a los 11 votos a favor del PSOE. Durante la sesión, el concejal Javier Gutiérrez defendió la necesidad de la reprobación, argumentando que las declaraciones de Moreno habían perjudicado la imagen de Talavera de la Reina a nivel nacional. Además, Gutiérrez criticó la gestión de las donaciones y acusó a Moreno de haberlas «apropiado de forma partidista».
En un tono confrontativo, el edil socialista instó al alcalde, José Julián Gregorio, a pronunciarse acerca de las declaraciones de Moreno y su postura sobre la Cruz Roja, planteando preguntas directas sobre su apoyo a la organización humanitaria.
David Moreno, por su parte, respondió a las acusaciones afirmando que no había criticado a la Cruz Roja, sino que había señalado su falta de información sobre lo que no había presenciado. En defensa de su accionar durante el temporal, subrayó que se había desplazado personalmente a las zonas afectadas y que había estado coordinando la ayuda humanitaria en la comarca de Talavera.
El concejal del PP, Jesús García-Barroso, tomó la palabra para defender la labor de la Cruz Roja, enfatizando que las declaraciones personales de Moreno no deberían empañar la imagen de la institución. No obstante, también rechazó la reprobación, alegando que era una maniobra de «tacticismo político» por parte del PSOE.
El debate en el pleno municipal refleja el clima de tensión política que se vive en Talavera de la Reina, donde las opiniones sobre la gestión de las ayudas y la imagen de las organizaciones solidarias están en el ojo del huracán, en medio de un marcado enfrentamiento entre los partidos políticos locales.