Ignacio de la Iglesia, viceportavoz del Grupo Municipal Socialista, ha afirmado que el proyecto de presupuestos presentado por el equipo de gobierno liderado por Ana Guarinos para el año 2024 demuestra que no existe un «agujero económico» en el Ayuntamiento de Guadalajara. Estas declaraciones se producen tras la aprobación de unos presupuestos que superan en cinco millones de euros a los últimos del exalcalde Alberto Rojo del año 2023, pasando de 91 a 96 millones.
De la Iglesia ha señalado que el incremento presupuestario coincide con la subida del IBI que se ha aplicado a los habitantes de la localidad y ha interpelado a Guarinos sobre la presunta falta de 20 millones de euros que ella había denunciado anteriormente. Según el viceportavoz socialista, si existiera tal déficit, el presupuesto se ubicaría alrededor de los 70 millones y no en los 96 millones actuales.
Ha criticado que Guarinos narrara a los ciudadanos que el alza en el IBI era necesaria para contrarrestar el déficit que supuestamente había dejado Rojo, mientras que ahora ve en estos fondos una vía para incrementar el presupuesto destinado a gastos generales.
En otro tenor, De la Iglesia ha lamentado que desde que Guarinos asumió el cargo, la atención a las necesidades básicas de los más vulnerables en Guadalajara ha declinado. Pone en relieve la significativa disminución en la ejecución y otorgamiento de ayudas económicas de emergencia social, para vivienda y para la adquisición de bienes de primera necesidad.
El viceportavoz detalló que durante la administración de Rojo se ejecutaban ayudas por medio millón de euros anuales, en contraste con los 40.000 euros de gestiones previas y la tendencia a la baja actual con Guarinos. Añadió que en 2023 sólo se otorgaron 288 ayudas por un total de menos de 240.000 euros, de las cuales, más de la mitad se asignaron en el primer semestre bajo el gobierno socialista. Mientras que en 2022 se concedieron un total de 630 ayudas por un monto de 537.456,91 euros, con un repartición mayor en el segundo semestre que aumentaba según las necesidades emergentes.
Este escenario refleja una disminución en el soporte brindado a los ciudadanos en situación de riesgo, en contraposición a los esfuerzos realizados en años anteriores para fortalecer el tejido social de Guadalajara. Las declaraciones de De la Iglesia ponen en cuestión las prioridades del gobierno actual y subrayan la necesidad de mantener una red de seguridad social sólida para los habitantes de la ciudad.
