La importancia de la empatía en el cuidado de las personas mayores
En la Gerencia de Atención Integrada de Tomelloso, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), se ha llevado a cabo un novedoso taller de simulación destinado a concienciar a los profesionales de la salud sobre las dificultades físicas y sensoriales que experimentan las personas ancianas y dependientes a diario.
En este taller, los participantes utilizaron diferentes dispositivos como gafas de simulación de enfermedades oculares, rodilleras, collarines, cubrezapatos, auriculares y guantes, con el fin de experimentar de primera mano las limitaciones de las capacidades sensoriales y motoras propias de la vejez.
El envejecimiento conlleva cambios morfológicos, fisiológicos y psicológicos que afectan a las habilidades relacionadas con el movimiento, así como a factores psicosociales y la capacidad de interactuar con el entorno. Por esta razón, es fundamental que los profesionales de la salud y cuidadores entiendan estas dificultades para proporcionar una atención de calidad a las personas mayores.
La responsable de Humanización de la Gerencia de Tomelloso, Marian López, enfatiza la importancia de la empatía y la comprensión en el cuidado de los mayores. Según López, «el cuidado de las personas mayores es una parte importante de las funciones de los profesionales sanitarios y de los cuidadores”, por lo que su actitud tiene un papel fundamental en la calidad de la asistencia.
Además, López explica que para humanizar el trato al mayor es esencial fomentar la empatía y la comprensión, entendiendo su punto de vista, sentimientos y emociones. Esta visión centrada en la persona es un eje fundamental del Plan de Humanización del Gobierno de Castilla-La Mancha, que busca impulsar una práctica de atención sanitaria más humana y empática.
Esta actividad formativa es solo un ejemplo de la apuesta por la humanización en la atención sanitaria, un enfoque que ha permeado tanto a los profesionales de la salud como a los recursos sociosanitarios de la región. Con un cambio de sensibilidad hacia la atención centrada en la persona, se espera mejorar la calidad de vida de las personas mayores y dependientes en Castilla-La Mancha.
