En un mundo donde la sostenibilidad se convierte en prioridad, ciertas plantas ganan protagonismo por su resistencia y fácil mantenimiento. Especies como sansevieria, pothos y suculentas destacan como opciones ideales para quienes buscan embellecer espacios sin complicaciones.
La sansevieria, o lengua de suegra, es famosa por soportar condiciones adversas, desde escasa luz hasta calor intenso. Esta planta no solo aporta estética con su variedad de colores, sino que también purifica el aire, ofreciendo un entorno más saludable.
El pothos, popular para quienes prefieren plantas colgantes, prospera en poca luz y requiere escaso riego, convirtiéndose en una excelente elección para personas con poco tiempo. Su atractivo follaje lo hace perfecto para oficinas y salas de estar.
Por su parte, las suculentas, con su variedad de formas y colores, han capturado el corazón de los aficionados a la jardinería. Almacenan agua en sus hojas, resistiendo largos períodos sin riego, lo que, junto a su resistencia a plagas, las hace ideales para principiantes y expertos.
Los diseñadores de interiores recomiendan estas plantas tanto por su estética como por los beneficios psicológicos que ofrecen. Conectar con la naturaleza, incluso en espacios urbanos, mejora el bienestar y reduce el estrés.
La tendencia hacia plantas de bajo mantenimiento va en aumento, permitiendo disfrutar de la naturaleza sin complicaciones. En una ventana o en una oficina, estas plantas son ahora compañeras ideales en la vida diaria.