La petrolera holandesa Shell ha sido autorizada a hacer negocios con Venezuela, lo que ha sido muy bien recibido por una parte del mercado petrolero. Esta autorización se produce gracias al levantamiento de las sanciones impuestas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro estadounidense, las cuales han afectado los procesos de producción, distribución y comercialización del gas y petróleo venezolano en los últimos años.
PDVSA, la empresa estatal de petróleo y gas de Venezuela, ha mostrado su voluntad de seguir estrechando lazos y establecer alianzas con multinacionales del sector energético. En este sentido, Pedro Tellechea Ruiz, quien encabeza la Junta Directiva de PDVSA designada por el presidente Nicolás Maduro, ha sido clave en la materialización de estas alianzas.
La autorización de Shell para hacer negocios con Venezuela tiene una duración de seis meses y su renovación dependerá de los avances en las negociaciones entre los sectores políticos de ambos países y del cumplimiento de los compromisos adquiridos.
La conformación de la Junta Directiva de PDVSA designada por Nicolás Maduro es la siguiente: Pedro Rafael Tellechea Ruiz como presidente, Héctor Andrés Obregón Pérez como vicepresidente ejecutivo, Heifred Segovia Marrero como vicepresidenta de Finanzas, Luis Enrique Molina Duque como vicepresidente de Exploración y Producción, Gustavo Adolfo Boadas Díaz en la vicepresidencia de Refinación, Luis Miguel González Núñez como vicepresidente de Gas, Ronny Rafael Romero Rodríguez en la vicepresidencia de Asuntos Internacionales, Génesis Sabrina Ron Solano como vicepresidenta de Comercio y Suministro Internacional, Juan Carlos Díaz Socorro como vicepresidente de Comercio y Suministro Nacional, y Leily Beatriz Ferrer Abendaño en la vicepresidencia de Planificación e Ingeniería.
Venezuela ha estado trabajando en alianzas con empresas multinacionales europeas en el sector del gas, como ENI y Repsol, durante todo el año 2023. El anuncio más reciente de estas alianzas es la colaboración entre Shell Plc, Venezuela y el gobierno de Trinidad y Tobago para la comercialización del gas extraído del Campo Dragón, ubicado al noreste del Golfo de Paria.
Este proyecto sorprendió a los especialistas, ya que ha estado en fase de diseño y planificación durante más de tres décadas. Sin embargo, se espera que pueda rendir sus frutos a corto plazo, dada la capacidad instalada ociosa de Trinidad y Tobago, lo que facilitará la exportación y comercialización del gas venezolano en el mercado europeo. Este acuerdo es aún más destacable si se compara con los tiempos proyectados para la explotación de otros campos de gas por parte de ENI y Repsol, que han sido estimados a largo plazo.
En cuanto a la producción petrolera, las experiencias con Chevron Corporation y China National Petroleum Corporation son ejemplos del acercamiento entre Venezuela y sus socios históricos, a pesar de las medidas coercitivas impuestas por Estados Unidos en 2019.
Los anuncios realizados por las autoridades del Departamento del Tesoro estadounidense podrían propiciar un aumento en las cuotas de producción de gas y petróleo de PDVSA en poco tiempo. Algunos expertos sugieren que las cifras podrían subir hasta un 25% a corto plazo, teniendo en cuenta los conflictos bélicos en Ucrania y Oriente Próximo, así como el período invernal y su impacto en la demanda de electricidad, gas y combustible.
Venezuela tiene seis meses para reactivar su economía, y durante ese tiempo el mercado energético estará expectante y evaluará los avances de PDVSA, que solía ser una referencia en la producción petrolera mundial. Esta apertura de negocios con Shell y otras multinacionales podría ser un paso importante en la recuperación económica de Venezuela.