La Concejalía de Bibliotecas del Ayuntamiento de Ciudad Real y la Asociación de Industrias Culturales y Científicas están desarrollando unos Talleres de Lectura Inclusiva para una treintena de personas con discapacidad de los Centros Ocupacionales de Autrade, Fuensanta y Down Caminar. Se trata de una de las actividades de fomento de la lectura dentro del Programa “Letreamos”, que ha puesto en marcha la Asociación de Industrias Culturales y Científicas en colaboración con el Ministerio de Cultura.
La Concejalía de Bibliotecas del Ayuntamiento de Ciudad Real y la Asociación de Industrias Culturales y Científicas están desarrollando unos Talleres de Lectura Inclusiva para una treintena de personas con discapacidad de los Centros Ocupacionales de Autrade, Fuensanta y Down Caminar. Se trata de una de las actividades de fomento de la lectura dentro del Programa “Letreamos”, que ha puesto en marcha la Asociación de Industrias Culturales y Científicas en colaboración con el Ministerio de Cultura.
El concejal de Bibliotecas, Nacho Sánchez, destacaba cómo este proyecto iba a iniciarse el año pasado, pero tuvo que paralizar por la pandemia. “Cuando nos lo presentaron el Ayuntamiento de ciudad Real decidió apoyarlo dentro de las actividades de extensión de las Bibliotecas Municipales para llegar al mayor número de colectivos, y especialmente a estos colectivos a los que le son más complicado organizar actividades.
Ascensión Almodóvar, de la Asociación de Industrias Culturales y Científicas, reconocía que el objetivo es promover actividades culturales dentro de colectivos de personas con distintas capacidades, utilizando la lectura como una herramienta inclusiva. Todo dentro de un amplio programa que incluye además clubes de lectura, lecturas compartidas, encuentros con escritores, concurso de booktubers, lecturas de cuentos o talleres de escritura creativa, algunos de ellos llevados a cabo “online”.
Cecilia Castillo, de Fuensanta reconocía que tras la experiencia el año pasado, el 9 de abril comenzaron con dos talleres de forma presencial en los que participan 5 usuarias residentes, que dedican una hora a la semana al lectura. “Este tipo de iniciativas nos dan un respiro, una motivación para todos los usuarios y residentes, que después de esta situación que estamos viviendo todos, es un halo de esperanza y de ilusión con el fomento de la lectura”.
Celia Muñoz, de Down Caminar, valoraba la iniciativa recordando una frase que dice que ‘hay grandes libros en el mundo, y muchos mundos en los libros’, “y cuando nos explicaron el proyectos, vimos que era una oportunidad buenísima de mostrar a los chicos de la asociación otros mundos mas allá de la situación tan tremenda que estábamos viviendo. La acogida ha sido buenísima y hay 18 chicos y chicas haciendo las sesiones vía zoom”.