Durante el debate electoral entre los principales candidatos a la Presidencia de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, el candidato del PSOE, ha destacado que en las elecciones del 28 de abril solo hay dos opciones: él o el actual presidente del PP, Paco Núñez, junto a Vox. García-Page ha afirmado que los partidos Ciudadanos y Podemos no tienen posibilidades de ganar. El candidato ha defendido su postura política como «moderada» y ha asegurado que gobierna «para todo el mundo con buenos modales», llegando a acuerdos con empresarios y sindicatos. García-Page ha criticado que la oposición presenta dos visiones distintas de la región y ha subrayado cómo ha mejorado la sanidad, educación y dependencia en la región desde su llegada al gobierno. El candidato ha propuesto ayudas y bonificaciones para emprendedores y autónomos, así como mejoras en el ámbito sanitario y educativo. En respuesta a las críticas de otros candidatos, García-Page ha defendido su política y ha acusado al PP de utilizar a ETA en su campaña política. El candidato también ha hablado sobre el Plan Hidrológico Nacional y la Ley de Fomento de la Agricultura Familiar y ha destacado su trabajo en la Unión Europea para que Castilla-La Mancha tenga un mayor presupuesto para la PAC. Finalmente, García-Page ha preguntado al candidato de Vox sobre la posibilidad de un trasvase del Duero y ha criticado la falta de propuestas para la sequía en esa región.
