Emiliano García-Page, presidente electo de Castilla-La Mancha, ha expresado su respaldo al adelanto de las elecciones generales al 23 de julio para evitar la prolongación del clima de «contaminación» en el país hasta diciembre. García-Page ha destacado que no desea siquiera imaginar cómo habrían sido los siguientes seis meses en un clima de confrontación, especialmente porque España asumirá la presidencia del Consejo de la UE. El presidente también ha manifestado su «dolor» por los resultados de las elecciones municipales y autonómicas en las que el PSOE no se ha desempeñado bien, pero cree que la remontada del partido es posible en las elecciones generales. García-Page ha augurado que habrá una confrontación clara entre izquierda y derecha, lo que aumentará la participación de los votantes en las elecciones generales. Por último, el presidente ha respaldado la decisión de Guillermo Fernández Vara y Javier Lambán de intentar ser investidos después de haber rechazado hacerlo en un primer momento porque considera necesario que los gobiernos que han salido y que requieren coalición expliciten en qué consiste ese acuerdo de gobierno.