En una deliciosa combinación de cultura y sabor, la llegada del Día Internacional del Libro nos invita no solo a sumergirnos en el vasto universo de las letras, sino también a explorar y desmitificar las numerosas creencias que giran en torno a uno de los mayores deleites de la humanidad: el chocolate. Paccari, destacado por su profundo conocimiento y experiencia en el mundo del cacao, aprovecha esta celebración para difundir hechos fascinantes y derribar mitos persistentes sobre este exquisito producto.
El cacao, ese fruto venerado desde tiempos ancestrales, posee un origen que podría sorprender a muchas personas. Aunque tradicionalmente se le ha asociado con Mesoamérica, recientes hallazgos arqueológicos han evidenciado que su cuna se encuentra en Sudamérica, más precisamente en Ecuador. Este descubrimiento se sustenta en análisis genéticos de artefactos cerámicos de la cultura Mayo-Chinchipe, indicando que fueron los pioneros en la domesticación del cacao, hace más de 5.000 años.
Contrario a la creencia popular de que el chocolate es un villano para la salud, la ciencia avanza ofreciendo una perspectiva más dulce y favorable. Con base en declaraciones de la Autoridad Europea en Seguridad Alimentaria (EFSA), se ha destacado que los flavonoles presentes en el cacao ejercen un efecto benéfico sobre la elasticidad de los vasos sanguíneos, facilitando así una circulación sanguínea óptima. Este punto desmiente el mito de que el chocolate solo aporta efectos negativos a nuestra salud.
La conservación del chocolate es otro tema rodeado de mitos. Frente a la costumbre de almacenarlo en refrigeración, expertos recomiendan mantenerlo en un ambiente seco, aireado y al resguardo de la luz directa, idealmente entre los 15° y 18°C. Esta medida no solo preserva su calidad, sino que también mantiene intactas sus propiedades.
Paccari, reconocida por su innovación y excelencia en la producción de chocolate, nos recuerda que el uso de este ingrediente va más allá de los postres. Su aplicación en platos salados y bebidas evidencia una búsqueda constante por crear nuevas experiencias gastronómicas, reflejo de un consumidor ávido de explorar sabores inusuales y de una industria que no teme reinventarse. Entre sus múltiples innovaciones se encuentra un exclusivo chocolate orgánico con esencia de Rosa Andina, ampliando así el espectro del sabor chocolatero.
Además, es fascinante recordar el rol del cacao como moneda en culturas mesoamericanas, como los mayas y los aztecas, antes de la llegada del dinero metálico. Esto subraya no solo su valor económico sino también su profunda impronta cultural a lo largo del tiempo.
Así como los libros, el chocolate es portador de historias, tradiciones y sorpresas. Paccari, al desvelar estos hechos curiosos, no solo enriquece nuestro conocimiento sobre el chocolate, sino que también nos invita a saborear, literal y figurativamente, las múltiples capas de su historia y sus bondades, derribando mitos y apreciando su verdadera esencia. Al celebrar el Día Internacional del Libro, permitámonos sumergir en las delicias de la lectura y del chocolate, descubriendo en cada bocado y en cada palabra, mundos llenos de sabiduría, placer y alegría.
