En un esfuerzo por reducir aún más la dependencia de la Unión Europea de las importaciones provenientes de Rusia y Bielorrusia, el Comité de Comercio Internacional ha aprobado un incremento del 50% en los aranceles sobre ciertos productos agrícolas de estos países. La medida busca limitar el acceso de bienes clave al mercado europeo, incentivando a los estados miembros a fortalecer sus propias industrias agrícolas y diversificar sus socios comerciales.
Esta decisión del Comité de Comercio Internacional se enmarca dentro de una estrategia más amplia de la UE para ejercer presión económica sobre Moscú y Minsk, especialmente en el contexto geopolítico actual, donde las tensiones con estas naciones han aumentado. El aumento en los aranceles refleja un compromiso renovado con la seguridad económica y la autosuficiencia europea, según fuentes cercanas al parlamento comunitario.
El impacto previsto de esta medida incluye un aumento en los precios de los productos agrícolas afectados dentro del mercado europeo a corto plazo. Sin embargo, los legisladores confían en que estos efectos se mitigarán con el tiempo, a medida que los agricultores europeos aumenten la producción para satisfacer la demanda interna. Además, se espera que la imposición de estos aranceles genere oportunidades para ampliar las relaciones comerciales de la UE con otros mercados internacionales.
Críticos de la medida argumentan que el aumento de aranceles podría perjudicar a los consumidores europeos, quienes podrían enfrentar precios más altos en sus compras diarias. Además, señalan que los cambios en las políticas comerciales deben acompañarse de un apoyo sustancial a los agricultores locales para garantizar una transición suave hacia una mayor autosuficiencia.
La propuesta del Comité de Comercio Internacional ahora se dirige a los estados miembros para su consideración final. Si se aprueba, la nueva política arancelaria entrará en vigor para mediados de 2025, reforzando el mensaje político de la UE sobre la necesidad de reducir la dependencia de las importaciones provenientes de regiones con las que existen tensiones diplomáticas.
Este paso del Comité subraya la importancia de reforzar la resiliencia económica de Europa en un contexto global cada vez más incierto, asegurando que la región pueda adaptarse a cambios abruptos en las relaciones de comercio internacional sin comprometer su estabilidad interna.
Nota de prensa UE
