El martes, la presidenta de Moldavia, Maia Sandu, dirigió un discurso ante los miembros del Parlamento Europeo en Estrasburgo, donde centró su intervención en las crecientes amenazas que enfrentan las democracias contemporáneas. Sandu, en su alocución, hizo hincapié en los desafíos políticos y sociales que pueden socavar los cimientos democráticos no solo en su país sino en toda Europa.
La presidenta destacó la importancia de la cooperación internacional para combatir influencias externas y movimientos internos que intentan debilitar los sistemas democráticos. «Es crucial para nuestras democracias permanecer vigilantes y unidas», afirmó Sandu, subrayando que la solidaridad entre las naciones europeas es esencial para preservar los valores compartidos.
La líder moldava enfatizó el compromiso de su nación con la reforma institucional y la transparencia gubernamental como pilares fundamentales para garantizar la estabilidad y el progreso. Alabó el apoyo continuo de la Unión Europea en estos aspectos y solicitó la intensificación de esfuerzos comunes para enfrentar las amenazas emergentes, como la desinformación y la interferencia electoral.
El discurso de Sandu resonó en un contexto de preocupación creciente por el auge de movimientos populistas y autoritarios en diversas regiones. Sus palabras sirvieron como un llamado a la acción conjunta, destacando la necesidad de robustecer las defensas democráticas para asegurar un futuro de paz y cooperación. La recepción de los eurodiputados fue positiva, reflejando el interés compartido por fortalecer el tejido democrático europeo ante los desafíos actuales y futuros.
Nota de prensa UE
