«El 2025 será el año en el que la sostenibilidad se convierta en una prioridad indiscutible en la decoración y el mobiliario», afirma González Mena, experto de Menamobel, una empresa que lleva cuatro décadas dedicándose a amueblar hogares. Este cambio de paradigma en el sector del mobiliario no solo responde a una creciente conciencia ambiental entre los consumidores, sino también a una demanda de procesos de producción más éticos y responsables. Así, en 2025, se prevé que los hogares adopten muebles fabricados con materiales reciclados, dibujando un panorama más ecológico y consciente.
Entre las principales tendencias que se vislumbran para este año, destacan los tonos terracota y los verdes naturales. Ivana subraya que estos colores evocarán una conexión más profunda con la naturaleza, aportando calidez, frescura, y fomentando una atmósfera de tranquilidad y bienestar en los espacios del hogar. Esta paleta cromática, influenciada por la naturaleza, busca armonizar los ambientes interiores con el entorno exterior.
La personalización en el diseño de interiores también se posicionará como un factor clave. «Los consumidores buscan piezas únicas que reflejen su estilo personal y su historia», asegura González Mena. Las marcas deberán ofrecer opciones que permitan a los clientes expresar su individualidad, otorgando un carácter único a cada espacio.
Otro aspecto a considerar es la funcionalidad del mobiliario. Con el aumento del trabajo remoto, surge la necesidad de que los espacios del hogar sean versátiles y adaptables a múltiples funciones. Los muebles modulares y las soluciones de almacenamiento inteligente serán esenciales para maximizar el espacio disponible, satisfaciendo así las variadas necesidades de la vida hogareña.
Para aquellos que deseen transformar una vivienda en un verdadero hogar en 2025, se recomiendan ciertos pasos. Optar por materiales sostenibles y productos reciclados es esencial. La creación de espacios multifuncionales, como sofás cama o mesas extensibles, puede facilitar el uso eficiente del espacio. Incorporar elementos naturales, como plantas, no solo mejora la estética sino también la calidad del aire. Personalizar los estilos y colores del ambiente contribuirá a reflejar la personalidad de quienes habitan el espacio, mientras que priorizar muebles cómodos y ergonómicos será crucial, especialmente cuando se pasan largos periodos en casa.
Con estas tendencias y consejos, el 2025 se perfila como un año emocionante para la decoración y el mobiliario. La combinación de sostenibilidad y personalización promete crear hogares que no solo sean estéticamente atractivos, sino también responsables y funcionales. Menamobel, con su historia y experiencia, se presenta como un referente en esta evolución, ofreciendo soluciones innovadoras desde su amplio espacio de exposición en Fuenlabrada hasta su accesible plataforma online que atiende a toda España.