La Policía Nacional ha llevado a cabo una operación en Talavera de la Reina que culminó con la desarticulación de un grupo criminal dedicado al tráfico de cocaína. En total, se han detenido a siete personas, quienes operaban en la ciudad introduciendo, tratando y vendiendo la droga tanto a otros traficantes de menor escala como a consumidores finales. Para ello, utilizaban dos domicilios pertenecientes a los líderes del grupo, una madre y su hijo, así como dos locales de hostelería que también estaban bajo su gestión.
La investigación se inició durante los meses de verano de este año, cuando los agentes comenzaron a obtener indicios sobre la actividad del grupo criminal en la zona. A medida que avanzaron las gestiones, se constató que este grupo no solo abastecía a otros traficantes, sino que también comercializaba directamente con los consumidores.
Tras la identificación de los responsables, se realizaron entradas y registros en tres locales de hostelería y tres domicilios en Talavera de la Reina, así como en un hogar adicional en Aldeanueva de San Bartolomé, en la provincia de Toledo. Durante estos registros, la policía logró incautar 427 gramos de cocaína en el domicilio de la líder de la organización, de los cuales la mayor parte estaba en paquetes precintados y el resto distribuido en dosis listas para la venta.
Además de la droga, las autoridades confiscaron 7.000 euros en efectivo, doce teléfonos móviles, un vehículo, así como herramientas de manipulación de la droga y básculas de precisión encontradas en todos los domicilios registrados. También se hallaron piedras preciosas en la vivienda de la mujer, valoradas en aproximadamente 25.000 euros, cuya procedencia está siendo objeto de investigación.
Con esta operación, la Policía Nacional no solo ha desarticulado el grupo criminal sino que también ha conseguido sacar de circulación una cantidad de cocaína que representaría más de 1.000 dosis en el mercado negro.