El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, dio a conocer que hoy los hospitales de Castilla-La Mancha tienen instaladas mil camas más y el triple de respiradores que en un mes de marzo tradicional.
Así lo expresó en la rueda de prensa celebrada en el Palacio de Fuensalida, explicando que “vivimos en una situación extraordinaria y con situaciones de mucha presión asistencial”.
Fernández Sanz explicó el martes que tienen 700 camas convencionales libres y 21 puestos de pacientes críticos a disposición de los clínicos en los hospitales de Castilla-La Mancha.
Además, destacó el trabajo en red que se realiza entre los hospitales regionales, con la filosofía de atender intramuros de los centros sanitarios de Castilla-La Mancha al mayor número posible de pacientes para maximizar la asistencia sanitaria que se presta.
Sobre la distribución de material recordó que se han repartido 1,4 millones de unidades de equipos de protección a las distintas gerencias sanitarias y que el Ministerio de Sanidad había proporcionado seis nuevos respiradores para asistencia sanitaria en la Comunidad.
Test rápidos
Sobre los test rápidos, Fernández Sanz recordó que son una técnica veloz de detección de anticuerpos, que sólo la pueden realizar los sanitarios y que sólo se pueden realizar en personas con síntomas o sospechas de que pueden tener la enfermedad.
Sirven para realizar una selección a las personas que hacemos test y ha destacado que sobre todo “son una parte complementaria del diagnóstico”.
De igual forma, el consejero de Sanidad quiso agradecer el trabajo de los profesionales sanitarios “que están trabajando al 500 por 100” y asimismo ha querido trasladar la condolencia de todo el Ejecutivo regional hacia los familiares y amigos de los fallecidos en esta pandemia.
