En el marco del popular reality show Supervivientes, ha trascendido que ciertos comentarios realizados por Ángel Cristo, hijo de Bárbara Rey, han sido objeto de censura. Según fuentes cercanas a la producción, Ángel ha pronunciado afirmaciones extremadamente negativas acerca de su familia, las cuales han sido consideradas demasiado inapropiadas como para ser difundidas al público. Esta decisión fue tomada en un esfuerzo por salvaguardar la imagen tanto del participante como del propio programa, buscando evitar controversias que pudiesen impactar negativamente su desarrollo.
El asunto fue analizado en detalle en el programa «Vamos a ver», donde se resaltó la firme actuación de los responsables de Supervivientes en manejar la situación con Ángel Cristo. Se mencionó específicamente cómo tal medida busca prevenir daños a la reputación del concurso ante comentarios que podrían ser interpretados como machistas y humillantes, especialmente dirigidos contra compañeras de competencia como Marieta y Miri. Se ha observado que las actitudes de Ángel han llevado a un aislamiento progresivo por parte de otros concursantes, destacando las figuras de Javier Ungría y Gorka Ibarguren, quienes, al igual que el resto, han optado por distanciarse.
Este aislamiento no solo se está evidenciando dentro del contexto del concurso, sino que comienza a reflejar posibles repercusiones en la esfera personal de Ángel Cristo. Este incidente subraya la complejidad de manejar las dinámicas humanas en este tipo de formatos televisivos, donde la línea entre el entretenimiento y el respeto hacia las personas puede resultar difícil de discernir.
