La Fundación Alivia ha realizado un llamado al Gobierno para implementar medidas concretas que eviten la discriminación laboral contra pacientes de cáncer, tanto para aquellos que buscan reintegrarse a sus trabajos después de un diagnóstico o tratamiento, como para quienes están buscando empleo nuevo. Este llamado se hace relevante en vísperas del Día Mundial del Trabajo, destacando la importancia de no considerar un diagnóstico de cáncer como el fin de la carrera profesional de una persona. La organización subraya el derecho de los pacientes a tener adaptaciones en su lugar de trabajo que correspondan a sus necesidades específicas, especialmente si no presentan síntomas que afecten su rendimiento laboral.
Datos alarmantes del Observatorio del Cáncer indican que alrededor del 37% de los pacientes de cáncer en España están en plena edad laboral y enfrentan riesgos significativos relacionados con su empleo debido a la enfermedad. Estas estadísticas son aún más preocupantes dado que, según la Asociación Española contra el Cáncer, estos pacientes tienen un 34% más de posibilidades de perder sus empleos comparados con la población general.
Un estudio publicado en la revista *Women & Health*, que analizó a 149 mujeres tras cirugías de cáncer de mama, revela que el 73.9% desearon retornar a sus trabajos seis meses después de la intervención quirúrgica. Esto resalta la voluntad y el interés de los pacientes por seguir siendo parte activa del mercado laboral pese a su diagnóstico.
Además, investigaciones recientes en Cataluña y publicadas en *BMC Public Health* enfatizan la importancia de modificar los espacios de trabajo para satisfacer las demandas específicas de los supervivientes de cáncer, con el objetivo de prevenir la salida prematura del mercado laboral, ya sea por retiro anticipado o por discapacidad permanente.
Asensio Rodríguez, director de la Fundación Alivia en España, insiste en que el cáncer y el trabajo pueden ser compatibles, argumentando que continuar laborando puede ser, en muchos casos, parte de la terapia del paciente, ayudando a mantener una actitud positiva y una rutina constante.
El «derecho al olvido oncológico», una legislación introducida en España en 2023, representa un paso adelante en la lucha contra la discriminación, ya que evita que los pacientes tengan que revelar su historial médico de cáncer. Sin embargo, desde la perspectiva de la Fundación Alivia, esta medida es insuficiente. Por ello, la fundación urge la implementación de acciones más efectivas para asegurar la completa aplicación y cumplimiento de la ley, garantizando así que las empresas adopten plenamente la nueva normativa y fomenten un ambiente laboral más inclusivo y adaptativo para los pacientes de cáncer.
Este llamado a la acción tiene como objetivo no solo proteger los derechos laborales de los pacientes de cáncer, sino también promover una mayor conciencia y comprensión sobre la capacidad de estas personas para contribuir valiosamente en el ámbito laboral, desmintiendo prejuicios y fomentando prácticas de inclusión en todas las industrias.
