Talavera de la Reina (Toledo), 24 de agosto de 2017.- La Consulta Joven del Área Integrada de Talavera de la Reina, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), ha atendido durante el curso 2016-2017 un total de 489 consultas, un 2,7 por ciento más que en el curso anterior, continuando así con su progresivo incremento de la demanda de este recurso asistencial.
Así, esta atención individualizada se lleva a cabo, con frecuencia semanal, en el Centro de Salud La Algodonera. Además, se ofrece a los usuarios la posibilidad de realizar consultas a través de otros recursos, como el teléfono o por correo electrónico.
La coordinadora de la Consulta Joven, la enfermera María Jesús Martín, apunta que las consultas más habituales están relacionadas con problemas de acoso, tanto en el ámbito escolar como desde la perspectiva de género, junto con problemas de ansiedad o de carácter afectivo-sexual.
Además, cuestiones como los problemas en el entorno familiar, los trastornos de la conducta alimentaria, el consumo de sustancias adictivas, los problemas de conducta, la adicción a nuevas tecnologías o los problemas de autoestima también protagonizan con frecuencia las consultas que se abordan en la Consulta Joven del Área Integrada de Talavera.
Talleres
Por otra parte, la actividad de la Consulta Joven se extiende también a un conjunto de actividades que se desarrollan en colaboración con centros educativos, centradas en distintos aspectos de educación para la salud.
Así, durante el curso 2016-2017 se han celebrado 68 de estos talleres, un 19 por ciento más que en el curso anterior, abordando especialmente la educación afectivo-sexual, pero también relacionados con la prevención de consumo de tabaco, alcohol y otras sustancias; nutrición o acoso escolar, entre otros aspectos.
En este sentido, María Jesús Martín apunta que son especialmente relevantes los talleres relacionados con la violencia de género, ya que cada vez se detectan comportamientos de estas características en edades más tempranas, en particular en lo que se refiere al control de la pareja.
Así, recuerda que cuando se habla de maltrato no hay que pensar exclusivamente en su vertiente física, sino también en el maltrato psicológico. En este sentido, señala que “en los adolescentes es muy difícil encontrar casos de violencia de género con maltrato físico, sin embargo, cada vez más se observan comportamientos en los que la presión psicológica que ejerce el maltratador y la dependencia que se crea es incluso más destructiva”.