Las nuevas tecnologías digitales están revolucionando la industria de la construcción, permitiendo automatizar procesos, reducir costes y tiempos de construcción, mejorar la eficiencia y la seguridad, e impulsar la sostenibilidad para hacer que las edificaciones sean más asequibles para los usuarios.
Este proceso de industrialización está atrayendo a perfiles tecnológicos, renovando la imagen del sector y atrayendo al mejor talento disponible, facilitando el relevo generacional que es necesario para abordar los nuevos retos del sector de la construcción.
La industria 4.0 está automatizando muchas de las actividades de la construcción, apoyando el diseño de los procesos y permitiendo tomar decisiones basadas en datos reales y simulaciones realizadas a partir de modelos digitales. El uso de tecnología BIM (Building Information Modeling), la impresión 3D, maquinaria automatizada y robots son algunas de las soluciones que este modelo ofrece.
Según Carmen Caro, responsable de la división de Construcción en Catenon, «este reto abre una gran oportunidad para incorporar talento al sector, con condiciones laborales más atractivas, entornos menos condicionados por factores físicos y climatológicos, y mayor inclusión de mujeres en la construcción. Además, es fundamental en un momento en el que el relevo generacional es una necesidad para el sector».
El objetivo es modernizar y digitalizar el sector, promoviendo una formación más tecnológica desde la universidad hacia este nuevo paradigma, para desarrollar una carrera profesional en un entorno industrial y atraer talento con nuevas capacidades, respondiendo a los problemas de captación de profesionales que enfrentan las empresas del sector en la actualidad.
Dos grandes tendencias están transformando la industria de la construcción: la digitalización y la industrialización. La digitalización implica el uso de tecnologías digitales para mejorar y optimizar los procesos en todas las etapas del ciclo de vida de un proyecto de construcción. Dentro de esta tendencia destacan tecnologías como el modelado de información de construcción (BIM), realidad aumentada (AR), realidad virtual (VR), inteligencia artificial (IA), Internet de las cosas (IoT), robótica y automatización.
Por otro lado, la industrialización en la construcción implica la aplicación de métodos y procesos de fabricación industrializados en la construcción de edificios y estructuras. Esto incluye la prefabricación y modularización de componentes de construcción en fábricas, de manera más eficiente y controlada antes de su ensamblaje. Esta tendencia permite una construcción más rápida, eficiente y rentable, con una reducción en los costes laborales y una mejora en la calidad y consistencia de los productos finales.
La digitalización y la industrialización en la construcción están cambiando la forma en que se diseñan, construyen y gestionan los proyectos, con el objetivo de mejorar la eficiencia, la calidad y fomentar la sostenibilidad en toda la industria. Son clave para mantener la competitividad de las empresas y su habilidad de adaptarse a un entorno en constante evolución.
La demanda de nuevos perfiles profesionales en la construcción, como especialistas en BIM, ingenieros en robótica y automatización, ingenieros en materiales innovadores y sostenibles, y técnicos en fabricación y montaje prefabricado, seguirá creciendo a medida que la industria adopte más tecnologías digitales y métodos industrializados.
Los beneficios de la digitalización en la construcción incluyen una mayor eficiencia en la planificación y el diseño, mayor seguridad en el sitio de construcción, reducción de costes y tiempos de construcción, y mayor sostenibilidad desde el punto de vista ambiental y económico.
En resumen, la digitalización y la industrialización están transformando la industria de la construcción, abriendo nuevas oportunidades, atrayendo nuevo talento y mejorando la eficiencia, la calidad y la sostenibilidad de los proyectos en el sector.