El Gobierno de Castilla-La Mancha ha dado un gran impulso al tejido empresarial de Tarancón, invirtiendo más de 21,2 millones de euros a través de la Consejería de Economía, Empresas y Empleo. De esa cantidad, 13 millones se han destinado directamente a apoyar a las empresas locales. La consejera Patricia Franco ha destacado el éxito del proyecto de Fassa Bortolo, una inversión de 90 millones de euros que creará 130 puestos de trabajo directos, así como un centenar de empleos indirectos y más de 400 durante la fase de construcción.
Según Franco, esta inversión coloca a Tarancón a la vanguardia de la transformación industrial que vive Castilla-La Mancha, demostrando que la región tiene el potencial de convertirse en el epicentro verde industrial del país. Además, la fábrica de yeso laminado en Tarancón alinea perfectamente con los objetivos del Plan de Medidas para la Industrialización de Castilla-La Mancha y supone un gran impulso a las capacidades tecnológicas e industriales de la región.
Desde la llegada del presidente Page a Fuensalida, la Consejería de Economía, Empresas y Empleo ha invertido más de 21,2 millones de euros en Tarancón, principalmente en políticas públicas de empleo, cualificación profesional y apoyo empresarial. Entre ellas, 13 millones de euros han ido directamente a apoyar a las empresas locales.
La llegada de Fassa Bortolo también beneficiará al sector de la construcción, que ha creado más de 19,100 empleos en Castilla-La Mancha desde 2015 y emplea a más de 70,000 personas directamente en la región. Además, esta inversión supone un paso más en la apertura exterior de la economía regional, que ha registrado una cifra récord en exportaciones en enero de este año.
El acto de presentación del proyecto contó con la presencia del presidente regional, Emiliano García-Page, la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, el alcalde de Tarancón, José López Carrizo, entre otros.