El sector del camping en España ha vivido una notable evolución en los últimos años, registrando cifras históricas en pernoctaciones y niveles de ocupación, además de un aumento significativo en la inversión. Sin embargo, de cara al 2025, el sector enfrenta desafíos cruciales que deben ser superados para mantener su ascenso. Según HolaCamp, una reconocida operadora y gestora de campings, los principales obstáculos incluyen la ampliación de las temporadas medias, el desarrollo de soluciones sostenibles ante problemas hídricos y climáticos, y la diversificación más allá del tradicional turismo de sol y playa.
Alfonso Leprevost, CEO y cofundador de HolaCamp, subraya la importancia de extender las temporadas medias más allá de los meses de junio y septiembre. Durante estos meses, la actividad en los campings españoles disminuye, lo cual crea una oportunidad para gestionar mejor la demanda y evitar la saturación en temporada alta. Leprevost resalta que las empresas requieren seguridad jurídica y apoyo para desarrollar proyectos que hagan del camping una opción viable durante todo el año. Además, destaca la necesidad de que las regulaciones y los incentivos gubernamentales estén alineados con esta visión.
Por otro lado, la diversificación de la oferta turística es clave para el futuro del sector. «No se puede depender de ser el Silicon Valley del sol», explica Leprevost, señalando que España no puede basarse únicamente en el modelo de «sol y playa». España tiene un potencial enorme para desarrollar experiencias de turismo gastronómico y de aventura que complementen el camping, ayudando a redistribuir el flujo turístico a lo largo del año y del territorio. Esto puede aliviar la presión sobre las áreas más concurridas durante la temporada alta.
Otro desafío significativo para 2025 es la gestión de los recursos hídricos y los fenómenos meteorológicos extremos. El sector se enfrenta a la necesidad de mitigar los riesgos asociados a las inclemencias del tiempo. Eventos como la sequía que prohibió temporalmente el uso de piscinas en campings y hoteles, y la DANA que afectó severamente a campings en la costa Mediterránea, han puesto de manifiesto las vulnerabilidades del sector.
No obstante, Leprevost destaca que, en términos de sostenibilidad, el sector del camping está a la vanguardia respecto a los objetivos de la Agenda 2030. Es esencial desarrollar infraestructuras para un uso eficiente y sostenible del agua y generar estrategias para mitigar los efectos del cambio climático. De acuerdo con la Federación Catalana de Campings, el 74% de los campings ya disponen de sistemas de reutilización de agua o depuradoras propias.
Finalmente, Leprevost advierte que muchos campings en el litoral están ubicados en zonas inundables, lo cual exige encontrar soluciones anticipadas para evitar desastres ante futuros eventos climatológicos. Lo vivido en 2024 debe servir como advertencia y guía para seguir trazando líneas de acción en esta dirección.
