En una serie de declaraciones que han intensificado las tensiones políticas, el ex presidente de Estados Unidos y actual candidato presidencial del Partido Republicano, Donald Trump, provocó una oleada de críticas tras sugerir que la vicepresidenta Kamala Harris ha cambiado su identidad racial como estrategia electoral. Durante una convención de la Asociación Nacional de Periodistas Negros en Chicago, Trump cuestionó la autenticidad de la identidad racial de Harris, alegando que no estaba al tanto de su herencia afroamericana hasta hace relativamente poco tiempo.
Trump declaró: «Ella siempre tuvo ascendencia india y solo promovía esa ascendencia. No sabía que era negra hasta hace unos años, cuando se volvió negra y ahora quiere ser conocida como negra. Así que no sé si es india o negra». Estas declaraciones han levantado una tormenta de críticas, calificando sus palabras de divisivas y fuera de lugar. Además, Trump aprovechó su intervención para lanzar insultos a varios periodistas presentes, a quienes calificó de «muy groseros».
La vicepresidenta Harris respondió a estos comentarios durante un evento en Houston, calificándolos de parte del «mismo show de siempre» y subrayó que el país merece un liderazgo que priorice la verdad y el respeto, en lugar de alimentar divisiones. «El pueblo estadounidense merece algo mejor», afirmó Harris, enfatizando la importancia de reconocer y celebrar las diferencias como una fuente de fortaleza.
La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, expresó enérgicamente su desaprobación por los comentarios de Trump, tildándolos de «repulsivos» e «insultantes». Jean-Pierre defendió el derecho individual a definir la propia identidad sin ser cuestionado o menospreciado, especialmente por figuras públicas de alta influencia.
Kamala Harris, nacida en Oakland, California, de madre india y padre jamaicano, hizo historia en 2020 al convertirse en la primera mujer, la primera afroamericana, y la primera persona de ascendencia india en servir como vicepresidenta de Estados Unidos. Ahora es vista como la favorita para suceder a Joe Biden como candidata presidencial del Partido Demócrata para las próximas elecciones del 5 de noviembre.
Esta no es la primera vez que Trump ha sido acusado de hacer comentarios racialmente insensibles, recordando incidentes pasados, incluido el cuestionamiento del lugar de nacimiento del expresidente Barack Obama. Mientras el país avanza hacia otro ciclo electoral, las recientes declaraciones de Trump subrayan una vez más cómo las cuestiones de identidad y raza continúan siendo puntos críticos en el diálogo político estadounidense.
