España ha impuesto un nuevo récord en la esfera global al realizar cerca de 6,000 trasplantes en 2023, lo que la mantiene como líder indiscutible en la práctica de trasplantes a nivel mundial. Esta hazaña se respalda en la notable cifra de cerca de 49 donantes fallecidos por cada millón de habitantes, el doble que la media de la Unión Europea, según ha comunicado el Ministerio de Sanidad.
No obstante, el panorama de los trasplantes hepáticos y pancreáticos presenta ciertas restricciones, especialmente en lo relacionado con la formación de nuevos cirujanos en este campo. A pesar de que España cuenta con 26 unidades especializadas en trasplante hepático, menos de la mitad de estos centros son capaces de realizar más de 40 trasplantes al año, y la situación se torna más limitante en el escenario de los trasplantes de páncreas. Esta situación plantea un reto significativo para los jóvenes residentes que buscan involucrarse de manera activa en estos departamentos durante su formación complementaria.
Consciente de estas restricciones, la Sección de Trasplantes de Órganos de la Asociación Española de Cirujanos (AEC) ha tomado cartas en el asunto a través de la implementación de diversas iniciativas dirigidas a fomentar el acceso a la formación en este especializado campo. Entre estas, destaca la creación del Curso de Donación de Órganos, dirigido a facilitar el aprendizaje en técnicas de donación – un paso inicial esencial en el mundo de los trasplantes. Paralelamente, han puesto en marcha el Proyecto Formativo en Trasplante Hepático y Pancreático, destinado especialmente a residentes de 4º y 5º año que no cuentan con Unidades de Trasplante en sus respectivos centros, con el fin de acercarlos a esta práctica y poner de relieve las necesidades existentes en la especialidad.
Además, se ofrece un programa Fellow en Cirugía Hepato-Bilio-Pancreática y Trasplante Hepático en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla. Este programa de un año de duración ofrece una especialización post-residencia, aunque la demanda excede con creces la oferta disponible.
La viabilidad futura y la subsistencia de las unidades de trasplante en España podrían enfrentarse a un desafío de relevo generacional si no se abordan adecuadamente las necesidades de formación y especialización para los nuevos profesionales. La vocación por esta disciplina, junto con la demanda de una intensa formación técnica y disponibilidad, caracteriza a una profesión considerada entre las más exigentes del ámbito sanitario.
En el umbral de nuevos logros y desafíos, es imperativo reconocer la importancia de asegurar la continuidad y evolución del sector de trasplantes en España, no solo por su impacto directo en la salvación de vidas sino también por su relevancia en el mantenimiento de la calidad y la innovación en el sistema sanitario del país.
