Los sindicatos STE-CLM, CSIF y CCOO han convocado una huelga que afectará al profesorado castellanomanchego en todas las provincias de la región. La protesta está programada para el 11 de septiembre a las 11:30 horas, coincidiendo con el inicio del curso escolar 2024/2025. Esta movilización busca visibilizar y poner en la agenda pública las reclamaciones del sector educativo en Castilla-La Mancha.
La convocatoria ha sido anunciada tras varias semanas de tensiones acumuladas entre los colectivos educativos y el gobierno regional. Los sindicatos exigen mejoras en las condiciones laborales y salariales del personal docente, así como una mayor inversión en recursos educativos y la reducción de la carga administrativa que, según ellos, afecta directamente a la calidad de la enseñanza.
En un comunicado conjunto, los representantes de los sindicatos STE-CLM, CSIF y CCOO han subrayado que la huelga es «el último recurso» tras el fracaso de las negociaciones con las autoridades competentes. «La falta de respuesta por parte del gobierno regional nos ha obligado a tomar esta drástica medida», señala el texto, que también invita a los padres, alumnos y la sociedad en general a solidarizarse con los docentes.
Por su parte, la Consejería de Educación ha expresado su «sorpresa» ante la convocatoria de la huelga. En declaraciones a la prensa, un portavoz del gobierno regional afirmó que «se han realizado esfuerzos significativos para mejorar las condiciones del profesorado» y que la huelga «perjudicará principalmente a los alumnos y sus familias, que se verán afectados por la interrupción del inicio del curso escolar».
A medida que se acerca la fecha, las expectativas y tensiones continúan elevándose. La comunidad educativa de Castilla-La Mancha se prepara para una jornada que podría marcar un antes y un después en las relaciones laborales dentro del sector. Las repercusiones de esta huelga, tanto a corto como a largo plazo, podrían ser significativas, y la resolución de las demandas presentadas por los sindicatos se presenta como un desafío ineludible para las autoridades regionales.
Fuente: CCOO Castilla-La Mancha