La seguridad eléctrica en hogares y establecimientos es crucial para evitar accidentes, y el interruptor diferencial juega un papel fundamental en esta tarea. Este dispositivo es esencial en el cuadro eléctrico ya que permite detectar fugas a tierra y otros problemas eléctricos, cortando la corriente instantáneamente para prevenir incidentes. La activación del diferencial se produce al identificar diferencias entre las corrientes de entrada y de salida.
Es vital realizar comprobaciones periódicas del interruptor diferencial para asegurar su correcto funcionamiento. Dependiendo del tipo de suministro eléctrico, se pueden encontrar interruptores de 2 polos, comunes en hogares, o de 4 polos en instalaciones más grandes o de uso industrial. Muchos diferenciales modernos incluyen un botón de prueba («T» o «test») que facilita esta verificación. Se recomienda efectuar estas pruebas mensualmente, después de desconectar los aparatos eléctricos para evitar daños.
No obstante, hay que distinguir el interruptor diferencial del ICP o interruptor de control de potencia, que actúa en caso de sobrepasar la potencia contratada. También es importante revisar el ICP regularmente.
Si al presionar el botón de test el diferencial no actúa correctamente, se debe investigar a fondo para identificar el problema. Esto puede incluir la verificación del estado físico del interruptor, las conexiones eléctricas, la presencia de derivaciones eléctricas, y la medición del bucle de impedancia. En caso de identificar anomalías, es imprescindible consultar a un electricista cualificado para realizar las reparaciones pertinentes.
La toma de tierra también debe ser revisada regularmente, ya que una conexión deficiente puede resultar en fugas eléctricas que el diferencial debe detectar. La revisión y mantenimiento continuo de estos componentes son esenciales para garantizar la seguridad eléctrica de los espacios, reforzando la importancia de contar con un electricista de confianza para estas tareas.
