La consejera de Fomento del Gobierno de Castilla-La Mancha, Agustina García Elez, ha lamentado este miércoles las declaraciones que se están haciendo desde el Levante español con respecto al último trasvase aprobado en el mes de noviembre de 7,5 hectómetros cúbicos por el Ministerio de Transición Ecológica, pues como ha dicho, “poco tienen que ver con un tono democrático”.
“No considero que nadie pueda decir a la Comisión del trasvase lo que tiene que hacer”, pues ha recordado que desde la región se ha sido siempre reivindicativo con las decisiones de la Comisión Técnica del trasvase “pero nunca me he atrevido a imponer una opinión, ni a exigir como lo están haciendo. Este Gobierno regional no quiere hablar de una guerra, y sobre todo de una guerra de agua, sino de decisiones que sean justas”, ha subrayado.
En palabras de la consejera, “se puede reivindicar, se puede opinar por supuesto, pero hablar de imposiciones e intentar manipular las decisiones que se toman desde un punto de vista técnico, no es comprensible. Y así ha lanzado la siguiente pregunta: “¿Por qué la decisiones tomadas hace unos meses desde el punto de vista técnico sobre el trasvase si valían, y la de este mes de derivar 7,5 hm3 lo ven mal?”.
No sobra agua en Castilla-La Mancha
García Élez ha apuntado a que desde el Levante “hay una clara oposición a que el agua se quede donde se necesita, en Castilla-La Mancha”, cuando los embalses de cabecera siguen aún a poco más del 20 por ciento de su volumen. “No sobra agua en Castilla-La Mancha, no sobra agua en los pantanos de cabecera y tampoco sobre agua en el Tajo medio, donde no se está cumpliendo el caudal ecológico y además contaminado por el Jarama”, ha remarcado.
Reunión entre la ministra de Transición Ecológica y el presidente de Murcia
De esta forma, por parte del Gobierno regional, como ha dicho la responsable de Fomento, “esperamos que la ministra mantenga su posición, como la ha venido hasta ahora manteniendo, a veces con decisiones que no han gustado a Castilla-La Mancha y por eso nos hemos defendido y hemos ido a los tribunales”. Por eso, entiende que el presidente de Murcia “haga lo que considere, pero que no pierda ese tono democrático y acepte las decisiones técnicas” que, como ha reiterado, “hace meses valían, pero ya no valen”.
Como ha destacado Agustina García Elez, lo que queda claro es que “hay una voracidad sin límite en el Levante. Siempre quieren más y más, máxime cuando vemos cómo se encuentran los campos de la zona del Levante que no pueden asumir el agua de la lluvia. El sentido común tiene que estar en la mesa de negociación y en la reunión de hoy de la ministra y el presidente de Murcia”.
Por eso, se ha mostrado contraria a la actitud de algunos sectores de la zona del Levante que “sólo por alzar y levantar la mano vamos a ir a una guerra de guerrillas. Estamos hablando del siglo XXI y que hay un Ministerio que toma decisiones desde un punto de vista técnico. No podemos sacar la guerra a la calle y a movilizar cuando las decisiones puedan beneficiar a otro territorio”, ha manifestado.
Así, ha recomendado que en el Levante adapten y reestructuren sus cultivos a la disponibilidad de agua. “Yo estaría muy preocupada si fuera consejera de esa región, donde el crecimiento y el desarrollo dependa de una tubería que sabemos que durante meses no ha funcionado”. Y como ha recordado, el PIB en esta zona ha seguido creciendo durante los once meses que no ha funcionado el trasvase, y su sector agroalimentario no se ha visto resentido, “porque han estado regando con el otro agua que tienen”, refiriéndose a las desaladoras.
Por tanto, ha concluido, “nunca nos hemos opuesto al trasvase para abastecimiento humano porque entendemos que hay unos criterios técnicos marcados por el Ministerio”. Por eso, ha insistido, “asumimos este trasvase como los anteriores, y por tanto, no buscamos una guerra, buscamos el sentido común en relación agua y lo que dice ese sentido común es que no hay agua de sobra en los pantanos de cabecera. Y por tanto, si no sobra, no se puede dar”.