La apuesta del modelo energético del Gobierno de Castilla-La Mancha pasa por poner a disposición de ayuntamientos, pymes y particulares, las energías renovables que son una oportunidad para mejorar el futuro y el de las generaciones venideras. En este sentido destacan las ayudas al ahorro y la eficiencia energética en el sector del transporte con la instalación de puntos de recarga eléctricos, gasineras e hidrogeneras. Así lo recoge hoy el Diario Oficial de Castilla-La Mancha que ha publicado la orden de bases para la habilitación de infraestructuras de puntos de recarga de vehículos eficientes y que está dotada con 350.000 euros.
Los puntos de recarga como complemento contarán con el apoyo del Ejecutivo y pueden ser de tres tipos: electricidad (denominadas electrineras), de gas (gasineras) y de hidrógeno (hidrogeneras). La convocatoria está dirigida a particulares, pymes y ayuntamientos.
Los puntos de recarga actuales de venta en el mercado oscilan para una potencia de 22 Kw entre 3.000 y 5.000 euros.
En 2018, Castilla-La Mancha es una de las comunidades autónomas modelo para la producción de energías renovables. Mientras la energía eléctrica procedente de renovables en territorio nacional supone el 51 por ciento del total de la potencia, en Castilla-La mancha una potencia del 73 por ciento es de origen renovable. De esta forma, se convierte en la primera comunidad autónoma en referencia a la potencia fotovoltaica instalada y la segunda en energía eólica y solar térmica.
El pasado mes de abril el Ejecutivo regional aprobó el impulso preferente y la tramitación urgente de las instalaciones de producción de energía eléctrica a partir de fuentes de energía renovables para maximizar el objetivo de potencia instalada en Castilla-La Mancha a 2020.